Panthers da vuelta a la página del SB50

El entrenador en jefe de Panteras de Carolina, Ron Rivera, cerró el episodio de la derrota en el Super Bowl 50 y ya piensa en la próxima campaña, en la cual el equipo encontrará ciertas casualidades que lo impulsarán a otro ciclo de ensueño.

Por más que analice las jugadas y los errores, el coach Rivera sabe bien que el trofeo Vince Lombardi no cambiará de manos y se quedará para siempre en las vitrinas de Broncos de Denver, por ello prefiere depositar todos sus esfuerzos rumbo a la temporada 2016 de la NFL.

Así pues, su meta está en la edición LI del “juego grande”, el cual se llevará a cabo el 5 de febrero del año entrante en el NRG Stadium de Houston, lugar que sin duda trae buenos recuerdos para la franquicia de Charlotte.

Esto debido a que hace 12 años, la ciudad texana albergó a los “felinos” en el primer “super domingo” de su historia, el cual perderían después frente a Patriotas de Nueva Inglaterra. Asimismo, el número 51 es el mismo que portara el fallecido apoyador Sam Mills, responsable de la famosa frase “Keep Pounding”, con la cual daba ánimos al equipo en su aventura por los playoffs de 2003, pero que también le daba fuerzas a él en su lucha contra el cáncer.

“Hay muchas similitudes y coincidencias que vienen con esto. No olvidemos que también es el número que usó el señor (Jerry) Richardson cuando estaba en Wofford”, puntualizó Rivera en referencia al dueño y fundador del conjunto. El timonel refirió, en entrevista con la estación local WFNZ, que la clave está en cómo se enfocarán esta temporada baja, para hacer válidas todas esas circunstancias, además de las altas y bajas que sufrirán en esta temporada baja.

“Hay ciertas cosas que deben pasar. Obviamente, perderemos algunos jugadores y hay que asegurarnos de remplazarlos con jugadores de calidad. En segundo lugar, tenemos que entender que, cuando nos presentemos, la gente va a darnos su mejor juego, punto”, sentenció.