Están de regreso. Los precandidatos presidenciales Bernie Sanders, del Partido Demócrata, y Donald Trump, del Republicano, ganaron con holgadas ventajas las elecciones primarias en el Estado de Nueva Hampshire, una victoria ya “cantada” por sondeos previos.
Tras su descalabro de la semana pasada en Iowa, ayer Sanders, senador por el Estado de Vermont, ganó con 60% contra 38% de su rival, la ex secretaria de Estado, Hillary Clinton, en la contienda por obtener la candidatura demócrata a la Presidencia de Estados Unidos.
Mientras tanto, Trump se apuntaba el triunfo con 35% frente al gobernador de Ohio, John Kasich, con 16%, y al senador por Texas, Ted Cruz, con 11 por ciento. El ex gobernador de Florida, Jeb Bush, quedó en cuarto, seguido por el senador Marco Rubio.
La elección de ayer en Nueva Hampshire fue la que mayor participación ha registrado en la historia del Estado, con 550 mil votantes, según estimaciones del Departamento de Estado de la Entidad.
Este mes, restan los procesos de selección de candidatos en Carolina del Sur y Nevada, donde Clinton cuenta con mayor preferencia de voto en el frente demócrata, y donde Trump una vez más se presenta como favorito.