Al participar en la sesión plenaria de la IV Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), el presidente Enrique Peña Nieto dijo que los países que conforman esta organización han tenido avances en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio trazados por la ONU; señaló que se trata de «buenos resultados, alentadores, pero insuficientes», ya que «nuestras sociedades aún enfrentan graves inequidades sociales»‘.
Por lo mismo, añadió, «tenemos que redoblar los esfuerzos en la lucha contra el hambre, la pobreza y la desigualdad en la región, con objetivos claros y metas precisas. En este gran propósito, el camino está trazado».
Ante el presidente ecuatoriano Rafael Correa ¿anfitrión del encuentro¿ y otros 21 jefes de estado y de gobierno reunidos en la sede de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), el mandatario precisó que se cumplieron, entre otras, las metas comprometidas en cobertura universal de enseñanza primaria, acceso igualitario de las niñas a la educación, y reducción de la mortalidad infantil.
Valoró que son buenos, pero resaltó que nuestras sociedades aún enfrentan graves inequidades sociales. «Actualmente, por ejemplo, el 20 por ciento de la población mejor remunerada concentra 54 por ciento de los ingresos, mientras que el 20 por ciento de los habitantes de menores recursos solo recibe el cuatro por ciento».
Y tras convocar a redoblar los esfuerzos en la lucha contra el hambre, la pobreza y la desigualdad, señaló que en nuestro país «estamos trabajando para alcanzar un México incluyente, a partir de una mayor calidad de vida y más oportunidades de superación para nuestra sociedad».
Explicó que con ese fin ampliamos la cobertura de los programas de mayor beneficio social y pusimos en marcha nuevas estrategias, como la Cruzada Nacional contra el Hambre, que ya beneficia a más de 5.8 millones de mexicanos, con distintos programas y acciones para mejorar su alimentación.
Además, mejoramos nuestro programa de transferencias en efectivo, Prospera, incorporándole nuevos componentes que facilitan la inclusión financiera, productiva, laboral y educativa de sus más de 6 millones de beneficiarios.
Dijo que los esfuerzos de cada país se potencian con la cooperación internacional y así lo estamos acreditando; estamos compartiendo experiencias de política pública con nuestros vecinos.
El presidente mexicano se pronunció por fortalecer la Celac con base en el criterio de que «ante nuestras diferencias, diálogo; ante nuestros retos, concertación».
El futuro de nuestra alianza -continuó- está ligado a nuestra capacidad para estar unidos, entendernos y colaborar en democracia. Permanecer unidos y avanzar juntos, es la aspiración de nuestras naciones.
Se dijo convencido de que, a partir del Plan de Acción 2016 de la Celac, las 33 naciones de la región seguirán intercambiando conocimientos, tecnologías y mejores prácticas de gobierno, para avanzar juntas hacia un desarrollo más equitativo, incluyente y sustentable.
Ofreció su respaldo al fortalecimiento de la Celac y se pronunció porque, de cara al futuro, este organismo se consolide como un foro privilegiado para identificar coincidencias, construir consensos y proyectar a nuestra región, en beneficio de sus más de 620 millones de habitantes.
«Debemos actuar con apego a nuestros más altos ideales de libertad y democracia; de justicia e igualdad, y sobre todo, de pleno respeto a la dignidad humana», señaló.
El presidente Peña Nieto pidió no perder de vista que «una de las principales fortalezas de América Latina y el Caribe es justamente, la pluralidad y diversidad de sus sociedades:».
En su intervención, el mandatario ofreció su respaldo al presidente de Colombia, «por su vocación democrática y su compromiso con el diálogo. Confiamos en que su país alcanzará una paz definitiva. México hace votos por que así sea».