Proteínas y aminoácidos

Muy a menudo escuchamos que una dieta rica en proteínas, también llamadas prótidos, resulta adecuada para el buen funcionamiento de nuestro organismo; sin embargo, pocas veces tenemos en claro porqué obtenemos un beneficio. A continuación mostramos algunas de las cualidades de estos compuestos orgánicos (útiles para fabricar, reemplazar y recuperar las células de los tejidos), así como los principales alimentos que las contienen. Las proteínas son las moléculas más abundantes de todos los tejidos vivientes, después del agua; constituyen 50% del peso seco de toda célula y están compuestas por aminoácidos o cadenas de elementos básicos (oxígeno, hidrógeno, carbono y nitrógeno). Las más conocidas son hemoglobina, albúmina, insulina y globuli-nas.
En realidad, nuestro organismo no requiere proteínas, sino de los aminoácidos que se obtienen al romperlas a través del proceso digestivo.
Los aminoácidos son elementos constructores del cuerpo: Crean células y tejidos y contienen la información genética. Algunos son enzimas (útiles para crear reacciones químicas, como la digestión) y otras tienen actividad hormonal.
Los seres humanos somos capaces de producir en forma espontánea 14 de los 22 aminoácidos conocidos; los ocho restantes, llamados aminoácidos esenciales, necesitamos extraerlos de los alimentos que consumimos.
Los aminoácidos esenciales son: lisina, isoleucina, treonina, valina, leucina, triptófano, metionina y fenilalanina. Además de éstos, un bebé necesita histidina, pues su organismo aún no es capaz de formarlo.