Acechan males a la sociedad por desdeñar vacunas: AMV

Abandonar la vacunación podría traer consecuencias mortales. Los expertos son contundentes al advertir que sin las vacunas sería inminente el retorno de enfermedades —con potenciales epidémicos— que ahora mismo ya están controladas.

A 25 años de la creación del Consejo Nacional de Vacunación (Conava), los especialistas coinciden en que México cuenta con uno de los mejores esquemas de vacunación en el mundo, integrado por 14 biológicos, y si bien las coberturas son buenas, hay huecos que deben atenderse.

Entre estos huecos destacan la disminución de las tasas de vacunación conforme aumenta la edad, situación atribuida al olvido, la desidia o al mito de que las vacunas son sólo para los niños.

Hoy, de acuerdo con nuestro esquema, la primera vacuna se debe suministrar al nacimiento y la última en la senectud para prevenir enfermedades y evitar fallecimientos.

Al respecto, Rodrigo Romero Feregrino, médico de la Asociación Mexicana de Vacunología, consideró que una de las paradojas es que las vacunas están siendo víctimas de su propio éxito.

“Como las personas ya no ven estas enfermedades, como la polio, sarampión o rubéola, pues le dan menos importancia a las vacunas, es decir, gracias a su éxito hay gente que decide ya no ir a vacunarse”, explicó.

Aunado a ello, el movimiento antivacunas que se ha generado en varias partes del mundo ha tenido consecuencias tales como los recientes brotes de sarampión registrados en Estados Unidos.

“El riesgo es que aparezcan de nuevo las enfermedades cuando nos dejamos de vacunar, lo que pasó justo con el brote de sarampión en California, pero lo más peligroso es que empezaríamos a ver muertes.”

Cada año, la inmunización evita, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), que mueran 2.5 millones de niños y niñas en el mundo.

Además de erradicar la viruela, con la vacunación se han controlado padecimientos como difteria, tétanos, tos ferina, poliomielitis y sarampión, por lo que se considera como la intervención médica que más vidas ha salvado en la historia y la de menor costo beneficio.

“Esta es justo la importancia de las vacunas, el único medio que la humanidad ha inventado para evitar que te enfermes y te mueras, entonces no hay que bajar la guardia”, exhortó Romero Feregrino.

En México, por ejemplo, el Conava reporta que en los últimos cinco años, se han invertido alrededor de dos mil 200 millones de pesos en la adquisición de vacunas para proteger a niños y niñas contra el rotavirus, lo que ha dado como resultado la reducción de más de 50 por ciento de las hospitalizaciones por esta causa y una disminución de más de 60 por ciento de la tasa de mortalidad.

De esta manera, con la universalización de la vacuna se han evitado alrededor de 180 mil casos de rotavirus, 25 mil hospitalizaciones y más de 900 muertes.

Sin embargo, Alma Ruth Romero, directora general de la organización Curarse en Salud, advirtió que si bien México se ha caracterizado por tener y mantener altas tasas de vacunación, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud 2012, al año de edad la cobertura de vacunación pasó de 78.4 por ciento en 2006 a 74.2 por ciento en 2012.

Asimismo, en el grupo de niños de un año a dos en el mismo periodo bajó de 84.7 por ciento a 77.9 por ciento.

“Pero lo que más nos impacta es que la vacunación a partir de los 12 años disminuye drásticamente, llegando a mostrar tasas de vacunación de hasta 27 por ciento. Si continuamos con estas deficiencias, cada vez será más difícil controlar enfermedades, seremos más propensos a epidemias y nos enfrentaremos a múltiples resistencias por parte de los medicamentos utilizados como tratamiento de estas enfermedades y volveremos al pasado donde las enfermedades infecciosas eran la principal causa de mortalidad”, planteó.

Ante ello, el especialista apuntó que uno de los mayores retos sigue siendo fomentar la vacunación entre los adultos, pues entre ellos persisten varias creencias para no utilizarlas como la idea de no necesitarlas, porque el doctor no se las ha prescrito o por las reacciones adversas que podrían provocarles.

Según un sondeo de la organización que preside, menos de una cuarta parte de la población sabe cuántas son las vacunas que deben de tener de acuerdo con su edad.

Es decir, 83 por ciento no sabe ni cuáles vacunas se les han aplicado ni cuáles son las vacunas que deben aplicar durante la vida adulta.

Y a pesar de que los adultos pueden protegerse mediante la vacunación de enfermedades, como la rubéola, sarampión, hepatitis B, influenza, tétanos, herpes zóster y la enfermedad neumocócica, las tasas de cobertura, de acuerdo con el Instituto Nacional de Geriatría, no rebasan 60 por ciento.

“Si bien es verdad que México cuenta con uno de los mejores esquemas de vacunación y elevadas tasas, esto está enfocado más que nada a la población infantil, dejando a un lado a los adolescentes, embarazadas y adultos, poblaciones altamente vulnerables a contraer cualquier tipo de enfermedad infecciosa, así que se tiene el reto de vacunar a la población conforme crece”, concluyó.