El senador panista Octavio Pedroza Gaitán consideró necesario que los ayuntamientos expidan un Plan Municipal de Desarrollo que cuente indicadores y sea vincula
torio para todas sus acciones de gobierno y políticas públicas.
“La implementación de las políticas públicas municipales por lo general se caracteriza por no realizar una evaluación sistémica que mida el impacto y la consecuencia de las mismas, cuestión que esta iniciativa busca lograr”, señaló.
El legislador resaltó la importancia de la planeación de políticas públicas municipales, con el propósito de cumplir con los compromisos hechos a la ciudadanía y tener la capacidad de solventar los problemas que de primera mano aqueja a los habitantes.
“El Plan Municipal de Desarrollo es el instrumento donde en los ayuntamientos se plasma el ideario político de la planilla ganadora en las elecciones, las promesas y las necesidades identificadas a lo largo de la campaña y en el periodo de la transición de gobierno, a lo cual se busca dar solución por medio de acciones puntuales establecidas en el mismo plan”, acotó.
Por ello, agregó el también presidente de la Comisión de Desarrollo Municipal, contar con un documento que concentre toda la información es fundamental para todo tomador de decisión.
“El ayuntamiento tiene la obligación de diseñar todo un sistema de planeación del desarrollo, el cual tiene que concretarse en el Plan Municipal y los programas que se deriven de él; en esta planeación se deben establecer los objetivos, metas, estrategias y prioridades para la asignación de recursos, responsabilidades y tiempos de ejecución en los que se coordinarán las acciones y se evaluarán los resultados”, apuntó.
Enfatizó que una vez aprobado y publicado el Plan por parte del ayuntamiento, —que deberá ser dentro de los tres meses siguientes a la toma de posesión— debe ser obligatorio para las dependencias de la administración pública municipal llevar a cabo las acciones en el ámbito de sus respectivas competencias.
En este sentido, Pedroza Gaitán expuso que los planes pueden modificarse o actualizarse en cualquier tiempo por el municipio, a fin de adecuarlo a las necesidades y realidades de la población, sin embargo, aclaró que debe de cuidarse que dichas modificaciones sean excepcionales y no desfiguren la planeación general.
Afirmó que el Plan Municipal de Desarrollo se debe de convertir en el eje de la política pública y también, indiscutiblemente, de los presupuestos y de su impacto en el aparato gubernamental.
“En la propuesta de presupuesto de ingreso del municipio que le hace llegar a los congresos locales, tendrán que justificar cuál sería el impacto en el cumplimiento de sus metas; y los compromisos económicos, como es el caso de la deuda que pretenda contraer, deberán estar alineados y justificados en los proyectos estratégicos que se fijen en dicho plan”, explicó.
La actual propuesta de modificación constitucional, continuó, pretende racionalizar las decisiones públicas del gobierno municipal, pero también la oposición de los integrantes del ayuntamiento.
“Si bien es cierto puede haber una oposición puntual de temas concretos y de coyuntura, la oposición a partir del diseño y aprobación del Plan tiene que estar basada principalmente en el cumplimiento de dicho plan, independientemente de que haya oposición en cualquier tema”, concluyó.
