Dos de los grandes placeres del hombre son, sin duda, comer y tener sexo. Sin embargo, no son una buena combinación en la mayoría de las ocasiones.
Es una tradición que los fines de año, por lo menos en México, la gente coma de más. Y es que las fiestas, que a veces ya inician desde antes del famoso maratón Guadalupe-Reyes, están enmarcadas por deliciosos platillos.
Lo cierto es que para la hora del sexo, no hay nada peor que un estómago lleno, pues además de que el desgaste físico de la actividad sexual interrumpe la digestión, el exceso de alimento provoca somnolencia, que es lo que menos necesita una pareja apasionada.
Que no te ataque el “mal del puerco”. Si piensas pasar más de una posada, la Navidad, el Año Nuevo y el Día de Reyes viviendo romance y llegando hasta la cama, no olvides las siguientes recomendaciones para evitar el famoso “mal del puerco”, la indigestión y la poca energía sexual.
1.- Los platillos de esta temporada son muy pesados, lo mejor es tener sexo antes de cenar.
2.- El pavo (no el relleno) y el bacalao son más ligeros que los romeritos y las pastas, prefiere porciones de éstos si después de cenar quieres sexo.
3.- Un poco de ensalada de manzana antes del sexo es un buen energético.
4.- El postre se come después del sexo, no antes. A menos que se trate de helado de vainilla.
5.- Si ingieres bebidas alcohólicas, trata de que sean con moderación, las bebidas “inocentes” como el ponche o sidra son traicioneras, ya que tienen mucha azúcar (propia de la fruta y el piloncillo, así como del “piquete” que por lo regular es ron de caña), pese a ser una bebida muy energética, es pesada y provoca sueño en poco tiempo.
6.- Para antes del sexo es mejor tomar una copa de vino, no de licor, tequila o mezcal; el primero desinhibe y ayuda a relajar, los otros alteran la percepción.
7.- Unas típicas fresas con chocolate pueden ser una buena invitación a la alcoba, pero no hay que comerlas en exceso.