¡La vasectomía ya es reversible!

Muchos hombres que ya han tenido uno o más hijos deciden no volver a ser padres y se realizan la vasectomía, es decir, un método anticonceptivo que está destinado a controlar la reproducción y que se suele considerar permanente.
Como recordarás, en una vasectomía un cirujano realiza un cierre u obstrucción en los conductos deferentes que transportan el esperma. Esto ocasiona que el esperma no puede llegar al fluido seminal y que sea absorbido por el cuerpo en lugar de ser expulsado. Sin espermatozoides, el semen no puede producir un embarazo.
Sin embargo, un nuevo matrimonio, la muerte de un hijo u otra circunstancia puede reavivar el anhelo de volver a ser llamado «papá». No es demasiado tarde para estos hombres, contrario a lo que se piensa, la vasectomía reversible es posible mediante la vasovasostomía, que en 90 a 95% de los casos permite recuperar la fertilidad masculina.
La vasovasostomía es la cirugía por la cual es posible ser padre después de la vasectomía al revertir esta operación para recuperar la fertilidad. En esta intervención se vuelven a unir los conductos deferentes que se seccionaron al realizar una vasectomía, con lo que permite de nuevo el paso de espermatozoides y su salida con el semen. Normalmente se realiza con anestesia local de larga duración, por lo que no precisa ingreso hospitalario y reduce los costos. Recordarás que tu vasectomía duró entre 7 y 30 minutos, pero la reversión de la vasectomía toma entre 2 y 4 horas.
Para recuperar la fertilidad después de la vasectomía es imprescindible que la vasovasostomía se realice mediante microcirugía, intervención quirúrgica que precisa de la utilización de un microscopio al operar estructuras de muy pequeño tamaño. Esta técnica realizada por un uroandrólogo se considera precisa dado que la luz del conducto deferente tiene entre 0.3 y 0.5 milímetros y los hilos con que se suturan son más finos que el cabello humano.
Un urólogo o uroandrólogo te explicará cómo se realiza la vasovasostomía en tu caso, la cual usualmente sigue estos pasos:
Primero se efectúa una incisión para llegar al punto donde se practicó la vasectomía.
Se seccionan los extremos obturados y se hacen cortes seriados en el segmento proveniente del testículo hasta apreciar la salida de fluido espermático.
Se analiza el fluido en el microscopio para apreciar su calidad. Si hay presencia de espermatozoides se procede a inyectar suero salino en el segmento abdominal del deferente para asegurar que haya presencia de espermatozoides en el semen.
Se proceden a unir los extremos sanos del deferente mediante la técnica elegida por el cirujano. La más efectiva es la de dos planos, en la que primero se une la muco-mucosa (luces del conducto) y después el resto de capas del deferente (músculos).
Vasovasostomia o vasectomía reversible
Los cuidados después de una vasovasostomía requieren analgésicos, antiinflamatorios y antibióticos. En algunos casos es posible regresar al trabajo en una semana, aunque se deben evitar labores duras y deportes al menos por tres semanas. En cuanto a las relaciones sexuales, deben posponerse por 10 días. Cabe destacar que se pueden tener molestias durante 2 ó 3 semanas después de la cirugía.
El porcentaje de éxito de la vasovasostomía, es decir, que haya presencia de espermatozoides en el semen (permeabilidad) es de aproximadamente 90%.
Sin embargo, puede variar dependiendo de:

La experiencia del uroandrólogo en microcirugía.
La técnica que se utilizó.
El tiempo transcurrido desde la realización de la vasectomía. Si es menor a 5 años, el éxito puede ser de 95%; de 5 a 10 años es de 80 a 90%; de 10 a 15 años es de 53 a 75%, y si es más de 15 años está por debajo de 35%.
La presencia de espermatozoides en el conducto deferente en el momento de la cirugía.
En general, una prueba de seminograma (análisis del semen) practicada a los tres meses indica el éxito y posibilidades de volver a tener hijos después de la vasectomía reversible, ya que la fertilidad se recupera en 3 a 8 meses. Aunque existe posibilidad de que no regrese, aproximadamente 80% de los pacientes logran recuperar espermatozoides en el semen al mes de la cirugía.

Por otro lado, la vasovasostomía no suele tener complicaciones, las más frecuentes son hematomas que se resuelven en pocos días. Otras complicaciones poco frecuentes son riesgos asociados con la anestesia, inflamación y edema de la piel o sangrado interno en el escroto. No obstante, se solucionan con un tratamiento apropiado.

Al recuperar la fertilidad mediante la vasovasostomía, las parejas tienen la ventaja de poder volver a ser padres de forma natural y de que es menos costosa que métodos como fertilización in vitro. No temas volver a pasar bajo el bisturí, es una técnica sencilla si se realiza por expertos y bien tolerada por pacientes.