Un joven que en mayo del 2013 se entregó a las autoridades, a quienes confesó haber asesinado, violado y desmembrado a una amiga, fue encontrado sin vida la mañana de ayer en el Centro de Arraigos de las autoridades estatales donde esperaba sentencia por el crimen.
Desde hace más de una semana se llevaba a cabo el juicio oral en contra de Carlos Jesús Martínez Ortiz, alias “El Jesy”, de 27 años de edad, por el crimen de Cinthia Selene Olivas Reyes, de 23 años.
Fue alrededor de las 5:45 de la mañana de ayer, cuando se reportó el hallazgo de Martínez Ortiz colgado de un cable de electricidad en el área del baño en el Centro de Arraigos. Al parecer dejó una carta póstuma argumentando que ya no aguantaba más y por eso había decidido quitarse la vida.
Unas horas después, el cadáver fue trasladado por la Dirección de Servicios Periciales al Servicio Médico Forense (Semefo) para determinar la causa de muerte. Por la tarde, los jueces orales, al ser notificados del deceso de Martínez Ortiz, emitieron el sobreseimiento de la causa penal por muerte.
Las investigaciones indicaron que todo comenzó el 3 de mayo de 2013 cuando Martínez Ortiz acudió a divertirse a un salón de baile aprovechando que su esposa se fue a trabajar a El Paso, Texas.
Durante su estancia en el salón de baile conoce a la víctima con quien baila durante toda la noche y al cerrar el antro la convence para que lo acompañe, junto con su amigo, a su vivienda ubicada en la colonia Praderas del Sur, donde prosiguen con el baile y consumen bebidas alcohólicas y mariguana.
Después de unos minutos lleva a la joven a su habitación para tener relaciones con ella de mutuo acuerdo. Sin embargo, tras unos minutos ingresa el amigo a la habitación para observarlos en el acto sexual y repentinamente se abalanza sobre la mujer para acuchillarla en diversas ocasiones.
Al ver a su compañero, Carlos Jesús también tomó un cuchillo y la atacó. Pese a que la mujer falleció, los homicidas todavía “bailaron con el cadáver” y violaron el cuerpo de la fémina. Horas después de cometer el crimen, el acompañante le dijo que ya se iba de la vivienda y que la bronca era de él.
Nervioso por lo que había sucedido empezó a pensar que iba a hacer. Al día siguiente, Carlos Jesús intentó deshacerse del cadáver echándolo en una camioneta, pero al no poder con el cuerpo, mejor decidió desmembrarla, por lo que acudió a una casa de empeño a comprar una motosierra.
Luego de cortar en pedazos el cuerpo de la mujer, tomó un taxi y repartió por la ciudad los restos.
El tronco fue localizado el 6 de mayo, en el interior de una caja de plástico. Después, la cabeza, fue encontrada dentro de un lote baldío, el día 11 de mayo, finalmente, el día 17 de mayo las autoridades encontraron las extremidades dentro de una maleta.
Luego de que los noticieros locales difundieron la foto del cuerpo, fue cuando el sujeto decidió entregarse a las autoridades. “Ya no podía más” fueron las palabras de Carlos Jesús, quien permaneció detenido y esta semana estaba a punto de recibir sentencia por este crimen.