Balazo a reloj de Palacio de Gobierno cumple 100 años

Por 100 años se ha mantenido el recuerdo de la Revolución mexicana en el reloj del Palacio de Gobierno, luego de que recibiera un balazo durante la lucha armada. El especialista José María Muriat Rouret comentó que hace 100 años un revolucionario disparó desde la Plaza de Armas hacia el reloj de Palacio de Gobierno, en esta ciudad. En entrevista, el cronista del estado agregó que «un pariente de Julián Medina, de la tropa de Pancho Villa, balaceó el reloj de Palacio de Gobierno cuando entraron a la ciudad de Guadalajara y dejaron como recuerdo un agujero de bala en ese reloj».
Durante muchos años el agujero permaneció ahí hasta que el gobierno estatal del periodo 2007-2013 restauró la fachada de Palacio de Gobierno. «Al reloj le cambiaron el vidrio y entonces se perdió el balazo, la gente protestó y se hizo otro agujero al vidrio nuevo pero se equivocaron de hora y ahora el balazo está como 10 minutos después de cómo estaba originalmente». A su vez, Josè Manuel Lòpez Ramos, encargado del acervo histórico del Archivo Municipal de Guadalajara «Salvador Gómez García», expresó en entrevista que en este 2015 se celebran 100 años de este hecho significativo. «A las 05:00 horas del 30 de enero de 1915 el coronel villista Jesús Medina hizo un disparo desde esta Plaza de Armas hacia el reloj de Palacio de Gobierno, cuyo hecho vino a hacer que el reloj dejara de funcionar, «para que los tapatíos recuerden el momento en que fueron liberados» Por su parte, el historiador de Guadalajara Fabián Navarro manifestó en entrevista que en la época de la Revolución Mexicana «los revolucionarios ingresaron y salieron de Guadalajara innumerables veces, ya que esta ciudad era tomada por un grupo, duraba unos días y llegaba otro y tomaban la ciudad». Mientras que Muriat Rouret resaltó también la batalla del 8 de julio de 1914, «la cual se registró en las faldas del Cerro del Cuatro, donde la gente que no había visto la revolución todavía supo que iba a ver una batalla ahí y se fueron a presenciarla». «Mucha gente se instaló en la falda del cerro, las señoras llevaban hasta sombrillas y sillas, ahí estaban listos para el espectáculo de la batalla hasta que de repente comenzaron a llegar los balazos y todos a correr de regreso, de hecho fue cuando ingresó la revolución a Jalisco», apuntó.

Mencionó que años después, ese camino, que era el principal para ingresar a Guadalajara, se nombró de manera oficial avenida 8 de Julio, «pero ahora una parte de esa avenida ya lleva el nombre de un empresario».

Recordó también la famosa batalla de la cuesta de Sayula de 1915, «donde se volteó un vagón que llevaba municiones y armas, además de muchas monedas de oro, y a la hora que se volteó el vagón la gente se preocupó más por ir por las monedas de oro que por el parque para seguir con la batalla, que finalmente ganaron los villistas».

Asimismo, dijo que la batalla del 8 de julio es muy importante porque «es la que empieza cerrar la pinza de la revolución contra Victoriano Huerta».

«En Guadalajara, el 8 de julio de 1914 y el veintitantos de septiembre en Zacatecas, Huerta entiende que está perdido y se va, esas son las dos batallas importantes de la Revolución en contra de Huerta».

Explicó que las demás batallas de la Revolución en Jalisco «son entre revolucionarios, básicamente entre carrancistas y villistas».

Consideró que en Jalisco «muchos no tenían la visión clara de lo que perseguía la Revolución, cada quien jalaba para su hebra, y se dieron enfrentamientos más que nada de corte cacical, por lo que seguían al jefe».

«Las desavenencias de los jefes es lo que dieron lugar a muchas de esas batallas en los años de 1915 y 1916 en Jalisco, hasta la derrota de Villa en Celaya, que es lo que tranquiliza esto», enfatizó.

Detalló que posteriormente, en Jalisco «las viejas fuerzas conservadoras resucitan y toman otro carácter a lo que llaman la ‘Cristiada’, por ejemplo».

«Vendría otro tipo de resistencia a la Revolución, pero ya es posterior, fue la resistencia de los grupos de derecha muy católicos en contra de las medidas revolucionarias», concluyó.