Sobrepeso y sexualidad: Ellos las prefieren… ¿con curvas?

Estudio realizado por las universidades de Newcastle y de Londres, publicado en la revista científica Plos One, aseguró que cuando los hombres están bajo estrés, encuentran más atractivas a las mujeres curvilíneas o con sobrepeso.
En este sentido, los expertos estudiaron a grupo de hombres expuestos a tareas demandantes y concluyeron que el estrés puede alterar la percepción sobre potenciales parejas, pues los resultados indicaron que en un contexto de mayor estrés los hombres tendían a considerar atractivas a parejas con mayor masa corporal.
«Si observas contextos donde hay escasez de alimentos, la percepción de las personas en torno a la masa corporal en una pareja potencial cambia. La preferencia por parejas con sobrepeso u obesidad parecen ser mayores en comparación con lugares donde hay abundancia de alimentos y un ambiente más relajado», señala Martin Tovee, de la Universidad de Newscastle, uno de los autores del estudio.
Sin embargo, no sólo el estrés cambia la percepción de las parejas, también el medio y el estilo de vida donde uno se desarrolla, pues de acuerdo con Tovee, ciertos factores pueden combinarse y transformarla. «Cambios en el medio o en el estilo de vida son factores que pueden revertir lo que uno piensa sobre el cuerpo ideal», concluyó el científico.
Razones de peso para prevenir riesgos de la obesidad en la sexualidad
Aunque es muy cierto que tener una sexualidad placentera no depende de cuerpos perfectos, el sobrepeso excesivo y la obesidad implican riesgos que pueden repercutir de manera negativa en el comportamiento y desempeño sexual, como:
Durante el acto sexual, el corazón de una persona con obesidad trabaja hasta 30 veces más, requiere mayor cantidad de sangre, aire y presión. La obesidad disminuye la resistencia del corazón y arterias, hay mayor susceptibilidad a enfermedades cardiacas hipertensión arterial y disfunciones sexuales.
Mujer. Provoca alteraciones en niveles de estrógenos y progesterona, inhibe la ovulación, afecta al ciclo menstrual y disminuye el deseo sexual, favorece resequedad vaginal, infertilidad y formación de quistes en ovarios.
Hombre. Afecta calidad del esperma y reduce posibilidades de fecundación. También condiciona disfunción eréctil y cáncer de próstata.
Produce baja autoestima, sobre todo en la mujer, debido a que los estereotipos sociales favorecen una silueta esbelta. También se experimenta vergüenza de mostrarse desnudo, por lo que se llega a evitar encuentros sexuales.
En caso de obesidad mórbida dificulta el acceso a los genitales, la ejecución de ciertos movimientos y posturas, asimismo, predispone a sufrir afecciones musculares y óseas. En este contexto es muy importante prevenir la obesidad para disfrutar de una sexualidad plena. Las siguientes recomendaciones pueden ayudarte a lograr un peso y estilo de vida más saludable:
Cuida tu dieta, elige alimentos con bajo contenido de grasas saturadas y carbohidratos, evita los productos que contienen cafeína y embutidos.
Haz ejercicio, por lo menos, 30 minutos tres días a la semana.
Baja tus niveles de estrés, ya que propicia ataques de ansiedad que pueden hacerte comer de más o malpasarte.
Duerme bien (ocho horas diarias) para tener un buen rendimiento en tus actividades. También te ayuda a tener corazón saludable, controlar el apetito y mejorar la memoria.
Organiza bien tus actividades a fin de reservar cierto tiempo para relajarte a través de alguna técnica de meditación.
Consulta a tu médico para mayor información sobre cómo puedes prevenir la obesidad en tu caso y si el exceso de peso está afectando el ejercicio de tu sexualidad. En medio de la vertiginosa rutina del mundo actual que envuelve al ser humano en un ritmo de vida cada vez más agitado, exigente y competitivo, con horarios y cargas de trabajo absorbentes, el estrés está a la orden del día transformando la calidad de vida de las personas, su sexualidad e, incluso, la forma en que los hombres elijen a su pareja, según científicos británicos. Con frecuencia, el éxito en amor y sexo se asocian a silueta delgada y bien formada, en el caso de mujeres, o a cuerpo musculoso en hombres. Pareciera que quienes tienen algunos kilos de más están destinados a no tener pareja y, mucho menos, vida sexual activa y plena.
En este contexto es importante tomar en cuenta que en la sexualidad intervienen los sentimientos, educación, cultura y valores, no una figura perfecta.

“Poder disfrutarla al máximo depende de cómo se mire cada quién; por ejemplo, hay gente delgada que se odia y personas ‘llenitas’ que disfrutan su cuerpo. Esto significa que la capacidad para tener intimidad satisfactoria se relaciona más con características personales que con la imagen corporal”, refiere Luis Perelman, codirector de la librería El Armario Abierto, localizada en la Ciudad de México, y vicepresidente de la Federación Mexicana de Educación Sexual y Sexología (Femess).