Tropas israelíes vestidas como vecinos de la zona mataron este jueves a un hombre palestino durante una redada israelí en un hospital de Cisjordania, indicó un responsable sanitario palestino. El ejército dijo que los soldados habían disparado a un hombre en el hospital cuando estaban allí para detener al sospechoso de un ataque con arma blanca.
En el hospital entraron más de 20 efectivos israelíes vestidos como gente local, incluyendo una que fingió ser una mujer de parto, dijo Yihad Shawar, director del hospital de Al-Ahli. Fueron hasta la unidad de cirugía, donde sacaron sus armas y asaltaron una sala donde se estaba atendiendo a Azzam Shalaldé por heridas de bala, señaló.
Los soldados esposaron a Shalaldé y a un hermano que estaba en la sala, y después dispararon y mataron a otro hermano, Abdalá, de 27 años, cuando salió de un baño, dijo Shawar.
«Esto es un crimen claro. Va en contra del derecho internacional. Nadie debería violar los hospitales, pero Israel lo hizo», dijo Shawar.
El ejército israelí dijo que sus tropas habían entrado en el centro para detener a Azzam Shalaldé, que según dijeron apuñaló a un israelí el mes pasado. Durante la detención, un sospechoso en el hospital atacó a las tropas, que lo abatieron a tiros, dijo el ejército.
El ejército no dio más detalles sobre la operación ni aclaró si sus efectivos iban de incógnito. Tampoco dio la identidad o el estado del hombre que fue baleado.
Las fuerzas armadas señalaron que habían detenido a Shalaldé, nacido en 1995 y que procede de una familia de «conocidos operativos de Hamas».El detenido estaba recibiendo atención para heridas de bala que según el ejército había sufrido el mes pasado cuando el israelí al que apuñaló le disparó.
El incidente del jueves se produce en medio de una ola de violencia entre israelíes y palestinos que no da signos de remitir. Doce israelíes han muerto en una serie de ataques de palestinos, mientras que 78 palestinos han muerto, 50 de ellos considerados como agresores por Israel y el resto en enfrentamientos con tropas israelíes.
La violencia estalló en Jerusalén por las tensiones en torno a un lugar de culto venerado por judíos y musulmanes, y pronto se extendió a Israel, Cisjordania y la Franja de Gaza.
