Juan Carlos Mendoza Ferrer, catedrático de la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), indicó que comercialización de la mariguana dependerá de las restricciones y normas que fije la Comisión Federal para la Prevención de Riesgos Sanitarios (Cofepris), que es la institución ante la cual solicitaron amparo los quejosos y que regula las drogas legales.
En términos de teoría económica planteó, que desde antes de la discusión existe un público al que puede denominársele como potencial (aunque aún no es correcto nombrarlo así), inquirió además que el costo de la cannabis sativa, dependerá de la oferta y la demanda que haya de la misma.
Explicó que todo producto o servicio puede enfrentarse a cuatro posibles mercados, no obstante el de la marihuana, estaría cerca de generar una competencia monopolística, si se toma en referencia el comportamiento económico que ha tenido en otros países donde ya se ha autorizado su consumo restringido, como Estados Unidos.
En este tipo de competencia, refiere el economista, hay muchos oferentes de un solo producto, sin embargo cada uno se diferencia del otro por características particulares añadidas al artículo, agregó que tomando como ejemplo lo ocurrido en Estados Unidos, si en México se abre un mercado en condiciones restringidas, habrá muchos interesados en comercializar el producto.
Expuso que las restricciones que se impongan al producto por parte del Estado impactarán en el precio de venta de la yerba, el cual tiene que alcanzar un punto de equilibrio entre costos de producción y pago de impuestos (si es que se le aplican), también influirá en el precio si la planta se emplea en investigaciones médicas.
Para tener una idea de lo que actualmente cuesta el adquirir esta droga, de acuerdo a una fuente periodística en el mercado ilegal el costo del kilo de marihuana varía desde los 200 pesos, en zonas donde se produce y hasta los 12 mil 300 pesos, en sitios donde se comercializa para su consumo. En Estados Unidos tres cigarrillos con la hoja de esta planta pueden comprarse por 20 dólares, mientras que en cualquier ciudad de México la adquisición de esta misma cantidad de producto puede comprarse hasta por 20 pesos.