Las infecciones respira-torias se presentan todo el año, aunque el número de casos generalmente crece más durante los meses fríos (octubre a marzo), en los que la influenza se convierte en importante amenaza para el ser humano, de ahí que los microorganismos responsables de la afección se encuentren entre los principales virus de la temporada invernal. La influenza es grave enfermedad que puede llevar a la hospitalización e, incluso, en ciertos casos provocar la muerte, razón por la que las autoridades sanitarias de México y todo el mundo recomiendan a la población la vacuna contra la gripe estacional, pues constituye la mejor manera de protegerse.
¿Por qué conviene recibir la vacuna antigripal?
A continuación describimos las principales ventajas que tiene la aplicación de la vacuna contra la influenza.
Previene hospitalizaciones y visitas al médico. La vacuna contra la influenza estacional está elaborada para proteger contra los virus que, según los investigadores, tienen más probabilidades de diseminarse y causar trastornos durante la temporada de influenza en curso. Por tanto, si te preguntas: ¿cuándo debo vacunarme contra la gripe?, debes saber que una vez que recibes la vacuna, transcurren alrededor de dos semanas para que la protección comience a funcionar, de manera que entre más rápido te apliques la vacuna antiinfluenza, menor riesgo tienes de enfermar, tener que acudir al médico o permanecer varios días en el hospital.
Evita enfermos en casa y propagación de los virus. Basta que alguien de la familia presente influenza para que en pocos días los casos se multipliquen en casa, el trabajo o la escuela. Por tanto, la vacuna contra la gripe estacional protege a quien la recibe y a todos los individuos de su entorno, especialmente a quienes son más vulnerables a enfermarse gravemente de esta afección.
Si se presenta, la enfermedad suele ser más leve. La vacuna contra la influenza puede hacer que la afección sea menos grave en caso de contraerla; también disminuye el riesgo de consecuencias más serias a raíz de la gripa, desde cancelar cualquier plan para disfrutar unas vacaciones invernales o las fiestas de fin de año, hasta obligar al paciente a internarse en una institución médica (con el consiguiente gasto que esto generalmente implica). Protege a las embarazadas. Cuando se aplica a una mujer en estado gestante, ayuda a proteger su salud y la del bebé en camino, incluso hasta seis meses después de nacer. Según estudio de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, la vacuna contra la gripe estacional en embarazadas tuvo una efectividad de 92% en la prevención de hospitalizaciones de bebés a causa de la enfermedad.
Reduce el gasto en medicamentos. Los síntomas de influenza surgen repentinamente e incluyen fiebre, escalofríos, tos, dolor de garganta y cabeza, además de fatiga; en algunos casos, también aparece vómito y diarrea. Si la persona ha recibido la vacuna antiinfluenza, existen grandes probabilidades de que estas molestias sean mínimas y no requieran la compra de numerosos medicamentos.
Constituye poderoso escudo contra otros virus. Continuamente aparecen nuevas cepas (variante del virus) de la enfermedad, por lo que cada año se crean nuevas versiones de la vacuna contra la gripe estacional para proteger contra cualquier microorganismo que circule durante la estación más reciente. Según autoridades de la Organización Mundial de la Salud y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (origen de la mayor parte de las investigaciones sobre el tema), para la temporada de influenza 2015-2016 han sido fabricadas vacunas que protegen contra ciertos virus de la influenza, que son virus AH1N1, virus H3N2 y virus tipo B (cepa análoga b). Sin embargo, las defensas que el organismo adquiere (anticuerpos) en respuesta a la vacunación también pueden formar un escudo contra otros virus diferentes, pero relacionados.
No provoca la enfermedad. Aunque muchas personas tienen esta errónea idea, la aplicación de la vacuna contra la influenza no causa la afección, ya que se fabrica con virus que han sido «inactivados» y, por tanto, no son infecciosos, o bien, sin ningún virus. Efectos secundarios que en nada se comparan a los síntomas de influenza.
Como sucede con cualquier medicamento, existen efectos secundarios que pueden estar relacionados con la administración de la vacuna antigripal, los cuales generalmente son leves y duran poco tiempo, en especial si se comparan con los síntomas de un caso grave de influenza estacional que puede comprometer seriamente la salud.