El uso inadecuado de los llamados teléfonos inteligentes representa un riesgo elevado, pues cada vez son más frecuentes las denuncias de personas que sufren ciberacoso y/o extorsión luego de que les fueron sustraídos archivos de sus celulares, advirtió la Policía Cibernética del estado.
El titular de la corporación, Pedro Rodríguez Núñez, dijo que se tiene la creencia de que una vez que se elimina el contenido del teléfono ya no puede ser recuperado, pero «la realidad es otra toda vez que sí es posible recuperar archivos borrados».
El funcionario de la Fiscalía General del Estado (FGE) informó que al mes se reciben unas 25 denuncias relacionadas con intentos de extorsión con el uso de herramientas informáticas, en los que varios casos están relacionados con los llamados teléfonos inteligentes.Esos delitos tienen que ver con el llamado ciberacoso, fraudes, extorsión, «grooming» (cuando una persona se hace pasar por un menor para engañar o atraer a otro), extorsión vía correo electrónico y también el intento de extorsión a cambio de no publicar contenidos obtenidos de teléfonos o computadoras, enlistó.
Por ello, expuso, es importante aclarar a esas personas que se toman fotografías o se graban en situaciones íntimas que es erróneo creer que una vez que las eliminan ya no representan ningún riesgo.
«Se han registrado casos de teléfonos de personas cuyos equipos han sido extraviados o sustraídos y luego ven el contenido.