Es una de las mujeres más guapas del planeta y está enamorada de los mexicanos… Por lo menos de los realizadores mexicanos.
¡Me encantan!. ¡No puedo creer todo lo que están haciendo!. Los mexicanos se están adueñando del cine. Deberían hacer aún más películas”, exclama la pelirroja desde el piso 41 del Mandarin Oriental Hotel de Nueva York, donde recibió a Excélsior para hablar de La cumbre escarlata (Crimson Peak), dirigida por el tapatío Guillermo del Toro.
“¡Qué gran grupo de cineastas tienen!”, agrega abriendo sus hermosos ojos verdes, antes de mencionar los nombres de Alfonso Cuarón, Alejandro González Iñárritu y Emmanuel Chivo Lubezki, a quien por cierto le entregó un Oscar en febrero pasado, en un momento que también fue inolvidable para ella. Estaba muy emocionada de anunciar ese premio, porque estaba segura que se lo ganaría y fue increíble poder gritar Chivoooo cuando ganó”, comenta entre risas que descubren sus relucientes dientes aperlados.
Jessica está feliz por la oportunidad que tuvo de reencontrarse con Del Toro en La cumbre escarlata, a quien conoció al estelarizar Mamá, que fue producida por el cineasta tapatío, quien durante el rodaje le platicó de un puñado de proyectos que estaba preparando, entre ellos, la cinta que se estrenará en México el próximo fin de semana.
Le dije que me encantaría volver a trabajar con él y poco tiempo después me mandó el guión de esta película, y quedé muy impresionada por lo que leí, pero, sobre todo, muy impresionada por lo poderosos que eran los personajes femeninos, que son el centro de la historia”, explicó.
En un tono de época y con toques góticos, la película que esta noche inaugurará la decimotercera edición del Festival Internacional de Cine de Morelia, narra la historia de Edith Cushing (Mia Wasikowska), una aspirante a escritora que lucha por huir de un trauma infantil que involucra a fantasmas y que un día conoce a Thomas Sharpe (Tom Hiddleston), un misterioso hombre que se roba su corazón.
Tras casarse, la pareja se muda a una misteriosa casa en la cima de una montaña con Lucille Sharpe (Jessica Chastain).
Donde la joven trata de escapar de sus propios fantasmas al tiempo que descubre que la casa respira, sangra y está llena de recuerdos y espíritus que le robarán el alma… si es que logra sobrevivir.
Es una película que trata sobre una mujer que está descubriendo quién es ella en realidad, y tratando de liberarse de las presiones de su padre, de los hombres, de la sociedad y de la época, para lograr lo que ella siempre ha querido ser, que es una escritora”, apuntó.
Chastain también habló un poco sobre la intensa relación que su personaje mantiene con su hermano, una especie de codependencia.
delirante que gravita en los terrenos de la locura.
“La película también habla de dos diferentes tipos de amor, uno representado por Lucille y el otro por Edith, quienes son empujadas por el impulso del amor.
“Todas las decisiones de Lucille son para dar y recibir amor. Cuando acepté el personaje, siempre me pregunté qué tan salvaje y libre podía ser para darle vida, fue un proceso muy divertido y creo que el resultado será toda una sorpresa para el público”, explicó la actriz.
¿Y Jessica Chastain cree en los fantasmas?, se le cuestionó.
“¡Claro que sí! Es mucho más divertido creer que existen a que no existen”, señala antes de hacer una promesa a los cineastas mexicanos.
Quiero hacer más películas con ustedes. Si me buscan ahí estaré. Espero también que esto lo lea Alfonso Cuarón e Iñárritu, para que sepan que estoy disponible. Que me digan cuándo comenzamos”, añade entre risas.
Chastain, quien sorprendentemente sigue soltera y mantiene su vida privada al margen de los medios de comunicación, está llamada a convertirse en una diva del séptimo arte, así como en una de las más grandes estrellas de Hollwyood, industria con la que recientemente ha filmado películas como Misión rescate, de Ridley Scott; Interstellar, de Christopher Nolan y El año más violento, de J. C. Chandor.