Sacuden el Sínodo de Obispos

La prensa italiana reveló ayer una supuesta carta dirigida al papa Francisco, supuestamente firmada por 13 cardenales, en la que se denuncia la metodología utilizada y un intento de manipular el resultado del Sínodo sobre la Familia.

El periodista del semanario italiano L’Espresso, Sandro Magister, publicó el lunes en su blog una carta supuestamente firmada por 13 cardenales pertenecientes al área más conservadora de la Iglesia católica.

En la misiva, se le informaba al Papa de su oposición a la metodología aplicada en este Sínodo.

También se acusaba de querer manipular el resultado al concentrarse demasiado en cuestiones como el acceso a los sacramentos a los divorciados que se vuelven a casar.

Sin embargo, la veracidad de la carta quedó en duda luego de que varios cardenales negaron haber firmado la misiva.

La prensa italiana publicó ayer declaraciones del cardenal George Pell, quien confirmó la existencia del documento enviado al Papa sobre el Sínodo, aunque él desmiente categóricamente el contenido publicado.

“Las firmas están equivocadas, pero, sobre todo, el contenido está equivocado. La mayor parte del contenido no corresponde. No sé por qué ha pasado esto y quién la ha filtrado así”, explicó Pell, también prefecto de la nueva Secretaría de Economía, en declaraciones publicadas por el diario
La Repubblica.

Otros cuatro cardenales dijeron explícitamente que no firmaron nada: el arzobispo de Milán, Angelo Scola, y el arzobispo de París, Andrè Vingt-Trois; el relator general del Sínodo, el húngaro Peter Erdo, y el penitenciario mayor, Mauro Piacenza.

En tanto, el cardenal sudafricano Fox Napier dijo que retiraba la firma de la carta, porque el texto no correspondía con el contenido que le habían comunicado.

El cardenal alemán Ludwig Müller, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, también aparece entre los firmantes, y ayer en declaraciones al diarioCorriere della Sera, aunque no quiere confirmar ni desmentir su firma, denuncia que haya sido publicada.

“Es un escándalo que se publique una misiva privada del pontífice. Esto es un nuevo VatiLeaks (…). La intención de quien ha querido hacer pública esta carta es la de sembrar peleas y crear tensiones. Me parece claro”, afirmó
Müller.

Por su parte, el cardenal mexicano, Norberto Rivera Carrera, rechazó haber firmado la carta y lamentó que algunos medios incluyeran su nombre en la lista de quienes la habrían suscrito.

El arzobispo de la Ciudad de México manifestó su “mayor respeto y lealtad” al papa Francisco.

Los otros cardenales que habrían firmado la carta, entre los que se encuentra el cardenal Jorge Urosa Savino, arzobispo de Caracas, guardaron silencio ayer.

El Papa habló sobre complots

La misiva tendría fecha del 5 de octubre, justo el día en el que comenzó el Sínodo.

Eso explicaría la intervención por sorpresa al día siguiente del Papa, cuando invitó a los 270 padres sinodales a evitar pensar que existen “complots” o “manipulaciones”.

El Papa habló de la “hermenéutica de la conspiración” y los invitó a tener “una plena confianza los unos en los otros, estar convencidos de lo que se expresa, y que el proceso sinodal se celebra en plena libertad”.