Científicos del Instituto Federal de Investigaciones de Suiza, ETH Zurich, lograron que dos robots se comuniquen entre ellos para recorrer sin traspié un terreno antes desconocido y con obstáculos.
Es lo que llaman navegación colaborativa para robots voladores y caminadores. La idea es que ambos aparatos, uno de hélice y el otro un cuadrúpedo, complementen sus funciones de observación aérea y desplazamiento terrestre para completar una tarea, como el trasporte de alguna carga de un punto a otro. El robot volador analiza y mapea el terreno desde el aire y trasmite la información al robot cuadrúpedo para que se desplace por la ruta, librando todos los obstáculos.