El ritmo de vida tan acelerado que se vive en la actualidad, aunado a las largas y pesadas jornadas de trabajo, ocasionan fuerte tensión muscular a nivel de los hombros y cuello, lo que deriva en terrible dolor conocido como cefalea tensional. Este malestar puede extenderse a la nuca y parte posterior de los ojos, y se percibe como si la cabeza “fuera exprimida”.
“Este problema es un trastorno que debe abordarse desde distintas perspectivas, ya que en muchas ocasiones también está vinculado a alteraciones cérvico-craneales, psicosociales e intolerancias alimenticias, todo lo cual se trata de manera óptima mediante terapia homeopática”, refiere el Dr. Manuel Gómez García, especialista egresado de la Escuela Libre de Homeopatía de México, en el Distrito Federal.
Sufrimiento cotidiano
De acuerdo con el entrevistado, dicha dolencia se vincula con múltiples circunstancias, entre las que se encuentran agresiones procedentes del mundo exterior y trastornos internos. Además, llega a asociarse con traumas emocionales que dejan huellas difíciles de borrar.
“En efecto, el sufrimiento de cada persona es diferente y encierra un mensaje que es necesario aprender a descifrar; por ejemplo, algunos pacientes lo describen como si tuvieran un ‘casco que oprime’, otros lo refieren como una sensación de ‘cabeza vacía’, ‘hervor’, ‘clavo hundido’, ‘taladro’, ‘martilleo’, ‘desgarramiento’ o ‘perforación’, denominaciones que evocan cierto grado de tortura”, detalla el médico homeópata.
En estos casos es común tener la impresión (muy real, por cierto) de que el cráneo es como caja de resonancia, distendida y a punto de estallar en cualquier momento. Las arterias empiezan a latir como martillazos sobre un armazón, en tanto el cuero cabelludo se torna muy doloroso al tacto. “Debido al frecuente ausentismo laboral que causa este problema, la Medicina convencional ha desarrollado ‘soluciones’ rápidas; sin embargo, ha fracasado en la verdadera terapia de fondo y en la prevención. Ello se debe a que se ha creado fuerte dependencia a medicamentos que sólo suavizan el dolor o lo eliminan de momento”, afirma el Dr. Gómez García.
Manejo adecuado
Tratamientos como el homeopático, que contemplan aspectos energéticos y anímico-espirituales en el ser humano, logran muy buenos resultados en las cefaleas causadas por tensión. Ello se debe a que la especialidad constituye una vía de desensibilización del ser humano mediante atenuación de los factores de agresión, reducción de los comportamientos desfavorables y apoyo a las reacciones positivas.
“El uso de medicamentos en dosis infinitesimales, procedentes del mundo mineral, vegetal y animal, devuelve su valor a esos recursos insospechados de la materia y restauran la unidad del ser humano con la naturaleza”, comenta el especialista. Es importante resaltar que el tratamiento homeopático se realiza de manera individualizada, es decir, de acuerdo con las características físicas y emocionales del paciente. No obstante, el médico homeópata señala que entre las sustancias que más se utilizan para el dolor de cabeza tensional encontramos: Belladona, Coffea, Nux vomica, Chelidonium, Lachesis, Ferrum metalicum, Manzanilla, Kali phos y Mag phos.