Alemania y Francia reclaman reparto ‘justo’ de refugiados

La canciller alemana, Angela Merkel, y su homólogo francés, François Hollande, reclamaron ayer en Berlín un reparto “justo” de los refugiados y avanzar en el cumplimiento del derecho de asilo europeo para hacer frente a la peor crisis migratoria desde la Segunda Guerra Mundial.
“Alemania y Francia esperan que todos los países miembros implanten realmente el derecho de asilo por completo”, declaró Merkel. “Si los países de la Unión Europea (UE) no cumplen con el acuerdo, entonces la Comisión Europea deberá intentar conseguir que esto ocurra”, dijo.
La mandataria alemana señaló la importancia de que los refugiados “se dividan en la UE de manera justa” y de que haya unos requisitos mínimos comunes a la hora de acoger a los miles de inmigrantes que día tras día llegan a las costas de la UE.
“Se trata del registro, pero también de estándares mínimos en aspectos como el alojamiento o la asistencia médica”, declaró.
Al igual que Merkel, Hollande destacó la importancia de este reparto “justo” y recordó que es una “grave carga” para los países de la UE.
“Queremos aprovechar la posibilidad para hablar sobre la gravísima situación de los refugiados”, explicó antes de reunirse con Merkel en Berlín.
“Debe haber una política de migración común, una armonización”, reclamó Hollande. “Hay momentos en la historia de la UE en la que nos encontramos ante situaciones extraordinarias. La de ahora es una de ellas”.
“El cumplimiento del sistema de asilo es urgentemente necesario y es el requisito para que funcione el sistema Schengen.
, que regula la libertad de movimiento dentro de la UE”, dijo. Asimismo, los dos mandatarios abogaron por definir de manera comunitaria el estatus de “países de origen seguros”, que facilita una devolución más rápida de estas personas a sus países de origen.
Merkel también condenó duramente los disturbios protagonizados por la extrema derecha ante un centro de refugiados en el este del país el fin de semana. Hollande también condenó los ataques. “Nada puede justificar una situación tan dolorosa”, dijo e indicó que el gran número de refugiados carga en gran medida a los países que los acogen. “Ahora vemos qué tensiones pueden desencadenar”, agregó.
Europa está desbordada ante la llegada masiva de indocumentados, que llevó a Italia a alertar el fin de semana de que la crisis migratoria pone en peligro los acuerdos de Schengen, que permiten la libre circulación de personas entre los países de la UE.