Emotivo encuentro de campeonas el que, con pretexto vacacional, tuvieron en su natal San Luis Potosí, Marcela Zacarías Valle, primera raqueta femenil de México y Miranda Rodríguez Díaz De León, quien con su tenis se gana sus estudios universitarios en Estados Unidos desde el año pasado con vertiginoso avance, tanto en lo académico como en lo deportivo.
La discreta amistad que ambas se profesan data de mediados de la década pasada, cuando Miranda recién era iniciada en el circuito nacional y Marcelita ya comenzaba sus giras. Ambas fueron entrenadas, al lado de Ana Sofía Sánchez, en La Loma Centro Deportivo bajo la tutela de Guillermo «Billy» Czerner, coach argentino que fuese mentor de la ex top 10 Gisela Dulko y que en la actualidad prevalece como guía de la perseverante Sofi Sánchez Palau con base en Buenos Aires.
Durante cinco años, las tres campeonas, alternadamente, viajaron juntas por todo el continente americano representando oficialmente a México en los ITF juniors. A nivel local, fueron el 1,2,3 por categoría en la mayoría de los Nacionales durante siete años y se colgaron medallas de oro en todas las Olimpiadas Nacionales en que participaron.
El pasado fin de semana, Marcela recién llegaba a San Luis tras de una gira de ensueño por Canadá, la que incluyó el colgarse la medalla de plata en dobles en los Juegos Panamericanos de Toronto. Al puntaje obtenido sumó los de los torneos de Granby y Gatineau, con lo que la reina potosina se halla a once guarismos de ser top 200 mundial. Su imagen está posicionada a tal grado como para quedar de finalista de la Fed Cup al « Premio Corazón», galardón con el que la rama femenil del tenis honra a quienes se distinguen por su humanismo y camaradería en el planeta tenis.
Mientras que por parte de Miranda todo es respeto y admiración por la calidad y nacionalismo del tenis de Marcela, donde el énfasis radica en su madurez, simpatía y voluntad de poder, para la supercampeona mexicana su colega Miranda tiene el respeto de la comunidad tenística no sólo por su triunfal carrera infantil – juvenil, sino también por su ánimo de continuar jugando, en un ambiente hipercompetitivo, estudiando carrera profesional al mismo tiempo.
Miranda recién regresó a Oklahoma, donde realiza sus estudios en el Seminole State College y en cuyo equipo de tenis milita como número uno. « Troyanas» es el nombre de su team universitario, número 2 en la Conferencia Central II y sexto de la Asociación Intercolegial de Tenis (ITA) de, a su vez, la Asociación Atlética Nacional de Colegios Junior (NJCAA).
Unos días antes de regresar a San Luis de vacaciones, Rodríguez y su equipo habían alcanzado su ranking merced a sus triunfos en el Campeonato Nacional Femenil 2015 de la ITA.
El torneo se llevó a cabo Tucson, Arizona, en el Centro Tenístico Jim Reffkin, del Centro Comunitario Ran-dolph, del 3 al 7 de este mayo sobre canchas duras, mismas que albergaron los combates entre los 27 estados de la unión que calificaron. De acuerdo con coaches y supervisores ITA, la apoteosis del encuentro nacional vino cuando Miranda avanzó con el mínimo de sets cedidos hasta cuartos, tanto en singles como en dobles. La potosina, sembrada número cuatro y con bye en primera ronda, desintegró al equipo del Collin College casi blanqueandolo en singles por 60 y 61 en segunda, score casi inédito en estas ligas.
Tras de cuatro días de combates, la Seminole State obtuvo un total de 22 puntos sobre los 27 posibles, colocándola en el sexto lugar, su más alto desde 2011 cuando apenas llegaron al noveno. A decir de Brian Nelson, coach de toda la región, nombrado el mejor del año oficialmente, con Miranda Rodríguez a la cabeza las ocho troyanas ofrecen un brillante futuro este año para el tenis femenil universitario que arranca su nueva temporada este mes de agosto.
