Afganistán: 27 secuestrados en ataque a campo de críquet

Kabul

Al menos dos personas murieron y otras seis resultaron heridas en un ataque armado durante un partido de críquet en el sureste de Afganistán, donde también fueron secuestrados 27 espectadores, en su mayoría menores, informó a Efe una fuente oficial.

Un grupo de supuestos insurgentes abrió fuego contra varias personas que ayer por la tarde jugaban al críquet en un campo deportivo del distrito de Zurmat, en la provincia de Paktia, dijo el vicegobernador provincial, Abdul Wali Sahi.

Dos de los jugadores, uno de ellos un policía fuera de servicio, fallecieron durante el tiroteo, mientras que otros cuatro hombres y dos mujeres resultaron heridos y tuvieron que ser trasladados a un hospital de la zona.

Cuando abandonaron el lugar, los atacantes se llevaron por la fuerza a 27 personas que se encontraban en el campo viendo el partido, indicó Sahi, quien especificó que 24 de ellos son menores.

«Hemos lanzado operaciones para rescatar a los niños hasta la pasada medianoche, pero tuvimos que pararlas debido a la oscuridad», explicó a Efe el jefe de Seguridad de Paktia, el generalDastageer Rustamyar.

El alto cargo militar aseguró que esas labores serán retomadas hoy y que las fuerzas de seguridad afganas tienen rodeados a los insurgentes cerca de las montañas, por lo que no les será posible trasladar a los rehenes a zonas boscosas.

Ambas fuentes atribuyeron el ataque a los talibanes, pero ningún grupo insurgente ha reclamado por el momento su autoría.

El número de secuestros ha aumentado en los últimos meses en Afganistán.

También en Paktia, 19 trabajadores de una compañía de desminado fueron raptados hace dos semanas y liberados tras dos días de cautiverio.

Autoridades locales han acusado recientemente al grupo yihadista Estado Islámico (EI) de capturar a miembros de la minoría étnica hazara y a musulmanes chiíes en varios puntos del país.

Entre estos casos destaca el de un grupo de 31 chiíes hazaras que permanecen en paradero desconocido desde finales de febrero, cuando fueron secuestrados en la sureña provincia de Zabul.