El presidente Enrique Peña Nieto sostuvo que la vigencia plena del Estado de derecho y el crecimiento económico van de la mano, y advirtió que asegurar la legalidad es combatir la impunidad, defender el empleo y el ingreso de miles de familias mexicanas.
Ayer, el mandatario realizó ante empresarios de todo el país una enérgica defensa de las industrias textil y del vestido frente a prácticas desleales de competencia dentro del país, como el contrabando y la “piratería” y el ingreso de mercancía subvaluada para su venta en territorio nacional.
Al clausurar las asambleas generales de las Cámaras Nacionales de las Industrias Textil y del Vestido, puso énfasis en que estas industrias, que generan más de siete mil millones de dólares al año, saben competir y ganar en los mercados globales.
Manifestó que por su precio y calidad los textiles y ropa hecha en México no necesitan subsidios gubernamentales ni medidas proteccionistas para triunfar en el mundo; “lo que sí requieren es un gobierno comprometido con el Estado de derecho”.
Agregó: “No es justo que la industria nacional tenga que competir en desventaja en su propio país frente a prácticas desleales e ilegales”, indicó. Dijo que su administración seguirá aplicando la ley y alentando la formalidad de la economía en su conjunto.
“La vigencia plena del Estado de derecho y el crecimiento económico van de la mano. Asegurar la legalidad es combatir la impunidad, es defender el empleo y el ingreso de miles de familias mexicanas”, asentó.
El Presidente subrayó que el gobierno federal cree en la apertura económica del país y en la globalización, que impulsa el libre comercio, “pero tenemos la certeza de que debe darse en el marco de la ley y en condiciones de equidad y de reciprocidad».
Piden apoyo
Los presidentes entrantes y salientes de ambas cámaras, Samuel Gershevich y Sergio López de la Cerda, de la Industria del Vestido, respectivamente, y Alfonso Juan Ayub y Moisés Rafael Kalach Balas, de la Industria Textil, respectivamente, señalaron su preocupación por falta de legalidad y prácticas desleales.
“Necesitamos consolidar este esfuerzo hasta que recuperemos la legalidad en nuestro comercio interno. (…) Los empresarios somos aliados de la legalidad, y es ahí donde debemos hacer nuestras aportaciones. Todas las formas de ilegalidad son, precisamente, las que inhiben la productividad, y a su vez, la prosperidad y el progreso (…) este sector es y será aliado de la legalidad”, dijo Moisés Kalach.
A su vez, Alfonso Juan Ayub, agregó: “Reconocemos la forma inteligente y estratégica como se elaboró y ejecutó ese plan contra la ilegalidad, que está desplazando una forma de crimen organizado para apoyar a los empresarios que queremos jugar limpio. Necesitamos consolidar este esfuerzo hasta que recuperemos la legalidad en nuestro comercio interno”.
El presidente Peña Nieto en su discurso aceptó entonces que una de las demandas más sentidas de los industriales del ramo “ha sido poner freno a la piratería, el contrabando, y más recientemente a la importación ilegal de mercancías subvaluadas”.
Reveló que en diciembre de 2014 ingresaron al país más de 53 millones de prendas con precio menor al del mercado, y que en los últimos meses del año pasado del total de importaciones de textiles 58% estaba subvaluado.
Hizo notar que se trabaja con la industria y destacó que para los primeros diez días de marzo sólo 3% de las importaciones de textiles y sólo un millón de prendas han ingresado al país a precio menor al del mercado.
Comentó que su gobierno ha trabajado sobre tres ejes con esta industria. Destacó que con 200 millones de pesos se construirá en Hidalgo el Centro Nacional de Innovación y Moda de las industrias textil y del vestido a fin de dar valor agregado a la producción mexicana para que sea más competitiva en los mercados internacionales y no depender de bajos costos laborales.
El segundo eje de acceso al financiamiento con tasas y condiciones más competitivas. El último es la legalidad y la vigencia del Estado de derecho contra piratería y contrabando.
