China: policía impide conmemoración de familiares del MH370

Pekín

La policía china obstaculizó el acto de conmemoración en Pekín de los familiares de los pasajeros chinos del vuelo MH370 de Malaysia Airlines hace un año, y que continúan desaparecidos sin que aún se haya encontrado rastro del aparato, que realizaba el trayecto entreKuala Lumpur y Pekín.

Los familiares chinos acudieron hoy al Templo del Lama de Pekín para rezar por sus allegados desaparecidos y para hablar con los medios de comunicación, a quienes habían convocado mediante un mensaje de texto la noche anterior.

No obstante, un fuerte dispositivo policial flanqueaba desde primera hora de esta mañana el templo, según pudo constatar Efe, e impidió que los familiares pudieran llevar a cabo su acto como lo habían previsto.

Aunque los agentes permitieron a los familiares rezar de forma privada en el interior del templo, no les dejaron hablar con los medios de comunicación, quienes fueron expulsados del templo y de las inmediaciones del mismo a empujones.

El número de agentes, de paisano y con uniforme, superaba al de familiares (unos 50) y al de periodistas en total, y no se retiró del lugar hasta bien entrada la tarde.

«Queremos saber qué ocurrió, no dejaremos de luchar por conocer la verdad», gritó un hombre desesperado ante las cámaras, y a quien las autoridades instaron enseguida a alejarse de los periodistas.

En un descuido de la policía, algunos de los ciudadanos chinos mostraban las camisetas que portaban para la ocasión, en cuya parte delantera se podía leer: «MH370, ¿dónde estás?».

En la trasera, los familiares dejaban un mensaje para la comunidad internacional: «Por favor, traed el MH370 de vuelta a casa».

«Ya no sé qué decirle a mi hija (de 6 años) sobre su padre. Ella me dice que el avión es el medio de transporte más rápido, entonces, ¿cómo puede tardar un año?», señaló a Efe Catherine Gao, que aún espera que vuelva su marido, en un restaurante cercano al templo donde acabaron todos los familiares comiendo tras su breve acto.

Los agentes de paisano continuaron supervisando la situación tanto dentro como en las afueras del restaurante.