Más de 25 mil balones de futbol conmemorativos del Mundial de Brasil 2014, prendas y calzado deportivo diverso, así como 108 kilogramos de talalafil, la sustancia activa detrás del Viagra, fueron los decomisos más numerosos de mercancía pirata en México.
El director del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), Miguel Ángel Margain, informó que en los diversos operativos realizados en colaboración con la Procuraduría General de la República (PGR), la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y las unidades de aseguramiento del SAT, se han decomisado aproximadamente seis millones de artículos, los cuales representan un monto aproximado de 17 millones de pesos.
En este orden, los artículos más ‘pirateados’ son: prendas y accesorios deportivos; aparatos de audio y video, y calzado.
Las marcas más vulneradas fueron las deportivas Nike, Adidas y Puma, de acuerdo con el IMPI. Estas empresas son blanco común de mercancía falsificada, pero se incrementó debido al mundial de futbol.
Del porcentaje nacional de consumo de piratería, el Distrito Federal concentra 80 por ciento, esto lo informó el IMPI en su más reciente reporte sobre delitos contra derechos de marcas.
El Viagra, nombre comercial del medicamento, fue el siguiente en la lista junto con amplios registros de piratería de películas y álbumes, aunque estos casos corresponden más a la materia de derechos de autor.
Recientemente la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) informó que en México hay índices preocupantes de venta de medicamentos pirata y caducos, productos que sufrieron un decomiso en 2012 de 200 toneladas.
Margain indicó que los productos decomisados no han sido destruidos aún como indica la ley debido a los cambios recientes en la Procuraduría General de la República, tras la salida de Jesús Murillo Karam.
La Cofepris ha diagnosticado que del total del consumo de medicamentos dedicados a la disfunción eréctil, cuatro por ciento corresponde a fármacos pirata, entre los que las marcas más falsificadas son Viagra y Cialis.
Las autoridades sanitarias han alertado que la mayor parte de estas transacciones se realizan a través de internet, tanto porque se ofertan a bajo precio como por el hecho de que sólo 17 por ciento en promedio, de las personas con problemas de este tipo acuden al médico para obtener el diagnóstico y la receta pertinente; es decir, la piratería ofrece la secrecía suficiente para un tema de salud pública en el que aún hay resistencias culturales.
Otro porcentaje destacado de dichas transacciones lo ocupa el de la venta de medicamentos genuinos, pero caducos, o bien muestras médicas que los laboratorios entregan de manera gratuita bajo expresa prohibición de que sean vendidos.