Los analistas del sector privado recortaron el pronóstico de crecimiento económico de 3.29 a 3.08% para 2015, informó el Banco de México (Banxico).
Este nuevo escenario ya incorpora el impacto que tendrá el reciente anuncio de recorte al gasto público por 124 mil 300 millones de pesos dentro de la administración federal.
Este nuevo pronóstico de los expertos en economía, que son encuestados por el banco central, queda fuera de lo que es el intervalo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, que a la fecha mantiene una proyección de entre 3.2 y 4.2%.
Además del recorte al gasto público, la Encuesta sobre las expectativas de los especialistas en economía del sector privado, reveló que otrasfuentes de preocupación y que podrían obstaculizar el crecimiento económico de México son los problemas de inseguridad, el precio de exportación del petróleo, la debilidad en el mercado interno y la inestabilidad financiera internacional.
Pero los problemas internos y del exterior no solo repercutieron el escenario al producto interno bruto (PIB) de este año, ya que los 35 grupos de análisis y consultoría económica del sector privado nacional y extranjero también revisaron a la baja la actividad productiva de 2016 y 2017.
Para el próximo año la reducción del PIB fue de 3.80 a 3.63%, mientras que para 2017 fue marginal, al pasar de 3.98 a 3.93%.
Tipo de cambio e inflación
Respecto al tipo de cambio, los analistas participantes en la encuesta previeron que la moneda se depreciará más durante 2015, ya que antes estimaban que al cierre del año se cotizaría en 14.18 pesos el dólar, y en el ejercicio actual lo revisaron a 14.54 pesos.
Para 2016, la decisión fue similar, pues de 14.09 pesos por dólar que anticiparon en la encuesta pasada, ahora la ajustaron a 14.31 pesos.
Por su parte, la inflación es una de las variables en la que esperan un comportamiento positivo y cercano al objetivo que tiene el Banco de México (3% +/-1%).
En 2015 esperan que cierre en 3.11%, mientras que en 2016 se situará en 3.46%.
Mientras que la inflación subyacente, considerada como un mejor parámetro para la medición de este indicador, ya que elimina bienes y servicios de alta volatilidad, se situará en 2.90% al cierre de este año, y en 3.13% en el próximo.