El presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova, mediante una carta abierta convocó a los diez partidos políticos que compiten en el actual proceso electoral “a mandar una señal de concordia, justo en estos tiempos difíciles de irritación y desconfianza”, pues “sólo a las corrientes más antide-mocráticas conviene la interrupción del diálogo y de los trabajos en el INE”.
Ni en el “convulso 1994” —año en que fue asesinado el candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio e irrumpió en Chiapas un grupo armado, el Ejército Zapa-tista de Liberación Nacional— se optó por cancelar la vía de las urnas, reclamó el consejero. El mensaje de Córdova ocurre en el momento difícil derivado del abandono de los trabajos del consejo general, de parte de siete partidos políticos, por lo que llamó a una solución.
Aclaró que reestablecer la normalidad del consejo general es una responsabilidad de todos sus integrantes. De parte de la autoridad electoral, el principal trabajo es generar los consensos en torno a cada pieza, a cada eslabón de la elección.
El proceso electoral “es uno de los muy pocos elementos que pueden producir confianza, participación amplia e inyectar aire fresco en la sociedad mexicana.
Es parte de la solución a nuestras crisis, una oportunidad para discutir y decidir el país que aspiramos y queremos ser; una vía hacia un futuro menos ominoso”. Expuso que para que “las elecciones sean parte de la solución depende de nosotros, las autoridades electorales, pero también de manera muy importante, de los partidos políticos”. Córdova acotó: “Es aquí donde debo detenerme. No tiene ningún sentido institu-cional ni político, negar la importancia de que siete partidos políticos han abandonado la herradura del Con-sejo General.
Es un hecho que lamento y que he intentado resolver desde el primer minuto en que decidieron abandonar las sesiones. No sólo porque estoy obligado legalmente a preservar la unidad del Consejo, sino porque su presencia es necesaria para la discusión, para equilibrar los acuerdos y sobre todo, para constatar y verificar que el entramado electoral está bien hecho”.
La presencia de todos importa, pues “no hay mejores ni más eficaces testigos y fiscales del proceso, que los partidos mismos”. En ese sentido, aseguró que “en el INE todo está a discusión, a evaluación, incluso a impugnación, y los partidos cuentan con todas las garantías materiales y legales para ello”.
Convocatoria
Para superar el escollo, ofreció que todos los consejeros redoblarán esfuerzos en pos de la concordia, “y convoco a una conversación abierta (todo lo franca que sea posible y todo lo ríspida que sea necesaria), pero que necesita hoy más que nunca, nuestro pluralismo y la confianza en el futuro político y pacífico de nuestra nación”. Previno que el proceso electoral en el Estado de Guerrero, donde cerca de dos mil capacita-dores del INE recorren calles y haciendo lo posible para que los ciudadanos se animen a cuidar el voto de sus vecinos, el primer domingo de junio, ha coagulado un llamado a impedir la elección, con el argumento del agravio de lo ocurrido en Iguala.
“Ni siquiera en el convulso año de 1994, con la sombra de la violencia política amenazando al país, fue cuestionada la vía electoral como el mecanismo legítimo para que los ciudadanos renovaran los poderes públicos”, planteó Lorenzo Córdova.
Por lo tanto advirtió que “no estamos en un momento cualquiera, esta coyuntura exige la mayor responsabilidad y la mayor seriedad de los actores que quieren que México sea —que siga siendo— una nación democrática”. Manifestó su convicción de que el proceso electoral “es parte de la solución a nuestras crisis, una oportunidad para discutir y decidir el país que aspiramos y queremos ser; una vía hacia un futuro menos ominoso”.
Rechazan partidos culpa
Los tres principales grupos parlamentarios en la Cámara de Diputados rechazaron que la elección de consejeros del Instituto Nacional Electoral haya respondido al pago de cuotas a los partidos políticos y que hoy tienen en una crisis al órgano electoral debido a que se encuentran ausentes del Consejo General siete partidos políticos.
Dijeron que si este dife-rendo no se remedia pronto las elecciones podrían estar en riesgo.
En entrevista, el vicepresidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, el priísta Francisco Arroyo Vierya, pidió que sea a través del diálogo como los partidos políticos regresen a la mesa.
Aunque no regresaran, los consejeros electorales podrían seguir tomando las decisiones y los acuerdos de cara al proceso electoral, advirtió Arroyo Vieyra.
Sobre este tema, uno de los principales negociadores del PAN en las reformas electorales, Fernando Rodríguez Doval, rechazó que haya habido cuotas para los partidos a la hora de elegir a los actuales integrantes del Consejo General del organismo electoral.
El legislador panista sí acusó que muchos consejeros electorales fueron cooptados por el PRI y el tricolor ahora tiene un bloque muy fuerte en este Consejo General.
“Ese bloque ya es una especie de grupo parlamentario que está actuando con total subordinación de los deseos del PRI y del gobierno”, declaró Rodríguez Doval.
La preocupación, agregó Fernando Rodríguez Doval, es que ese bloque con perfil priísta se consolide y se articule de manera permanente.
El diputado perredista Fernando Zárate, también rechazó que las cuotas hayan privilegiado en la elección.
Críticó que hubo partidos políticos que propusieron a los consejeros pero que ya no responden a agenda ciudadana alguna.
Diálogo infructuoso
El viernes pasado Córdova reanudó conversaciones con representantes del bloque opositor.
Ese día, el presidente del PAN, Gustavo Madero Muñoz, se pronunció porque los siete partidos que han abandonado el consejo general del INE, entre ellos el que lidera, realicen un esfuerzo para que el regreso al salón del pleno “se dé cuanto antes”, y el retorno a la normalidad en sus trabajos sea un hecho al inicio de las campañas electorales, el 5 de abril. Con información de Horacio Jiménez
