Las restricciones económicas originadas por el recorte presupuestal anunciado por el Gobierno Federal, no serán un impedimento para que la actual administración municipal deje finanzas sanas a la próxima gestión capitalina.
Así coincidieron en expresarlo regidores del Ayuntamiento de San Luis Potosí, que se sumaron a la postura del regidor Oliver Meade sobre la situación de las finanzas municipales.
Jesús Eduardo Noyola Bernal y Jorge Luis Pérez Ávila reconocieron que “el área de Tesorería trabaja para atender las observaciones de la cuenta pública, y se solventarán sin mayores complicaciones.”
Noyola Bernal, quien es presidente de la Comisión de Hacienda, aseguró que el gobierno municipal “se ha conducido con transparencia y responsabilidad” y si bien se tendrá un recorte en las participaciones federales, “se buscarán alternativas para financiar proyectos de impacto social.”
Dijo que estarán al pendiente para que las obras ya iniciadas concluyan y se entreguen en los siete meses restantes.
Sobre si se dejará deuda a la administración entrante, reafirmó el compromiso de no dejar pasivos bancarios. “Únicamente deberá continuar el pago de los adeudos generados de las dos gestiones anteriores, pero es importante remarcar que la actual logró mejores condiciones para enfrentar ese compromiso”, añadió.
Por su parte, Jorge Luis Pérez insistió que además de las medidas que se refuerzan por parte de la administración al dar cumplimiento con la Ley de Contabilidad Gubernamental, “se garantiza el uso de los recursos públicos en obras, acciones y proyectos de beneficio para quienes habitan San Luis Potosí.”
En cuanto a las observaciones de la Auditoría Superior, comentó que “son únicamente de forma y no de fondo, por lo que hay plena confianza en resolverlas y que todo quede debidamente clarificado.”