El arzobispo emérito de San Luis Potosí, Arturo Antonio Szymanski Ramírez, celebró, con sus amigos, el cumpleaños número 93, teniendo como anfitrión al empresario Jaime Chalita, en salón del hospital ubicado sobre la avenida Ricardo B. Anaya.
El jerarca católico llamó a fortalecer el amor por las patrias, grande y chica, México y San Luis Potosí y agradeció haber llegado a esta celebración con sus amigos.
Más tarde, en entrevista con los reporteros de la fuente, dijo que los periodistas integran en este proyecto de fortalecimiento una especie de fraternidad de la Teología del Encuentro para llevar el mensaje de que, entre todos podemos ayudarnos para crecer en la disposición siempre del trabajo por el bien común. Buscando el bien de México.
Al evento acudieron empresarios de diversas ramas, gente de toros, periodistas, religiosos, jóvenes católicos que han estado en el entorno del carismático arzobispo.
A nombre de los presentes, Efraín Álvarez Méndez extendió la felicitación a quien fuera el primero de los tres arzobispos que ha tenido San Luis Potosí. Álvarez Méndez dijo que don Antonio Arturo Szymansky hizo como San Juan, quien al recargar su cabeza en el pecho de Cristo tuvo el privilegio de escuchar el corazón de Dios, en referencia a la bonhomía del jerarca católico, su carisma y don de comunicación.
Álvarez Méndez remarcó que “el corazón siempre tiene razones… que no entiende la razón”, para realzar el carisma del jerarca católico que, como él mismo dice, se acerca rápidamente al centenario.
También sonaron las guitarras de un trío romántico, que entonó conocidos boleros de Los Panchos.
Filiberto Juárez, fue el improvisado maestro de ceremonias, quien dio lectura a sus epigramas dedicados a don Arturo Antonio Szymanski, destacando en particular uno que dice: Sepa Dios por qué somos tan ariscos, pues teniendo tres arzobispos ¡Ni así nos componemos!