Con el inicio de la Cuaresma donde se duplica el consumo de productos del mar, la Comisión Estatal para Prevenir Riesgos Sanitarios anunció una intensificación de sus acciones de vigilancia y control de pescados y mariscos en 700 restaurantes, centros comerciales y mercados de la entidad, poniendo especial énfasis en los alimentos de concha como los ostiones.
La subdirectora de Operación Sanitaria de la Coepris, Yolanda Guerrero Chávez dijo que los verificadores de las jurisdicciones sanitarias supervisarán las condiciones sanitarias del establecimiento, las condiciones en que preparan el producto y harán muestreos en aquellos puntos de venta para comprobar que los productos son inocuos, que no son riesgos para la salud.
La funcionaria de Salud señaló que lo que tratan es de evitar casos de enfermedades producidas por este tipo de alimentos en mal estado, como la salmonelosis, el vibrio y el cólera.
“Los productos que más riesgo contienen son los ostiones debido al tipo de filtrado que tiene por las valvas, se van conteniendo todos los microorganismos del medio sonde se cultiva y por eso se tiene que etiquetar el lugar donde se capturan, es lo que vigilamos que se tengan productos etiquetados de un lugar de captura que sea autorizado”, indicó.
Recomendó a los consumidores de pescados y mariscos que durante este periodo de Cuaresma que consuman productos de lugares confiables, que cumplan con prácticas de higiene y que se conserven en buenas condiciones, a temperatura de menos siete grados centígrados o bien congelados, pero que luego de descongelarse no se vuelva a congelar.
Guerrero Chávez informó que durante el año pasado suspendieron actividades a ocho establecimientos y aseguraron el producto en 20 ocasiones, “no solamente se ven los productos del mar, sino también verduras como el perejil y todas las que se usan para coctel y caldos, se hace un muestreo y se revisa que los establecimientos cumplan con todas las especificaciones de la normatividad”, culminó.