Ante el presidente Enrique Peña Nieto, el general secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda, subrayó que nadie puede estar por encima de la ley.
Como orador único de la ceremonia oficial por el 102 aniversario de la «Marcha de la Lealtad», asentó que la Constitución impone a los funcionarios la obligación irrenunciable de cumplir y hacer cumplir la Carta Magna y a las leyes que de ella emanen.
Asentó que esta gesta histórica nos enseña que nadie puede estar por encima de la ley y que ante acciones contra las instituciones siempre habrá mexicanos leales y con honor siempre dispuestos a hacer respetar la ley.
«Para las fuerzas armadas de la Nación no existen corrientes ni ideologías que nos perturben del ideario de honor que hemos cultivado, honor que con lealtad y sin desmayo profesamos a México», dijo.
En el patio principal del Castillo de Chapultepec, el general Cienfuegos indicó que ante los grandes retos que enfrenta el país el Ejército, Fuerza Aérea y Armada respetan siempre a las instituciones democráticas.
«Nuestra génesis histórica y popular, nuestros acendrados valores patrióticos, vocación de servicio e institucio-nalidad nos comprometen a comportarnos de tal manera», indicó.
Enfatizó que Mexico siempre contará con sus fuerzas armadas «de la lealtad institucional, defensoras de nuestra democracia».
Dijo que en su devenir, México ha enfrentado desafíos que han puesto a prueba la fortaleza del Estado y de la democracia, que han puesto en riesgo la soberanía y seguridad interior.
Asentó que los soldados y marinos tienen en la norma constitucional el poder de encarar estos retos, el poder de defender a la Patria y proteger a los mexicanos, estar a la altura de las circunstancias de cada momento histórico, contribuyendo a preservar el Estado de Derecho.
NADIE ALEJARA
AL EJÉRCITO
En su mensaje, el general secretario de la Defensa Nacional dijo que México es único y todos somos mexicanos con el anhelo de mejores condiciones de vida, progreso, seguridad y desarrollo. «Hay quienes quisieran distanciarnos del pueblo, imposible.
Somos uno y lo mismo, basta ver el rostro, la piel, el pensamiento y corazón de cada soldado para ver que somos pueblo, que somos México, igual que el resto de la Patria», indicó.
