Surgen sospechas por programa municipal de vales para calzado

En pleno proceso electoral para renovar en la entidad al gobernador, presidentes municipales y diputados locales y federales, el Ayuntamiento capitalino junto con la dirigencia estatal de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios Turísticos, aplican un programa de donación de vales por 200 pesos a las clases más necesitadas para que los canjeen por calzado.

Sin embargo, el presupuesto de 3 millones de pesos que se tiene para dicho programa asistencial se ejerce con opacidad y quizá violando la legislación en materia electoral, ya que a los beneficiarios les exigen a cambio del beneficio una fotocopia de la credencial para votar con fotografía expedida por el Instituto Nacional Electoral.

El presidente de la Canaco-Servytur, Gerardo Zermeño Pérez informó de la existencia del convenio firmado con el Ayuntamiento, “en donde permeamos 3 millones de pesos entre los afiliados y el municipio está otorgando vales por 200 pesos a las clases más necesitadas y que asistan a nuestros comercios de los zapatos”.

El dirigente empresarial añadió que la acción era una forma de “trabajar en equipo con el municipio” y que la Canaco estaba actuando como la representación formal de todo el gremio zapatero formal.

Sin embargo, al realizar un recorrido por diversas zapaterías de la calle Hidalgo, en el Centro de la capital potosina, algunos de los propietarios aseguraron que no están recibiendo dichos vales porque no los tomaron en cuenta, mientras que otros afirmaron que ni siquiera han sido enterados de dónde los van a canjear ellos.

“En diciembre vino una enviada de la Canaco para decirme que si quería entrar al programa obligatoriamente tenía que afiliarme a la Cámara; le contesté que no me interesaba porque primero quiero mejorar mis ventas. Sin embargo la gente han venido a querer canjear los vales que traen el logotipo de mi zapatería”, reprochó uno de los empresarios consultados.

Otro de ellos dijo que una ama de casa llegó a su zapatería con varios vales para canjearlos por calzado, y al preguntarle cómo los había obtenido dijo que unos se los habían dado en la escuela de sus hijos y otros en una reunión cerca de su casa en la colonia Garita, y que en ambos casos los promotores le pidieron copia de su credencial del INE.