La Guzmán llena al Pepsi Center de locura y amor

El Tour La Guzmán 1F llenó de recuerdos y humor al Pepsi Center cuando Alejandra Guzmán inundó de romanticismo y locura el recinto con casi sold out por más de una hora y media.
Fue en punto de las 21:00 horas que la cantante mostró un vídeo de su etapa más sensible y después salió con un sombrero negro de peluche abultado y un vestuario corto del mismo color para interpretar «Como ladrones», canción con la cual inició su repertorio.

«Bienvenidos al Pepsi Center», saludó antes de «Mírala míralo» que siguió con una noche de éxitos.

«Qué bonita manera de empezar el año, gracias por estar en este puente rockero y bienvenidos a todos a quienes no piden permiso, a las que tienen uno o dos novios y las loquitas como yo», complementó en «Mi manera de quererte» para después dedicar a quienes creen en el amor el tema «Volverte a amar».

«Tengo dos invitados de miedo. Es la primera vez que hago este show sana, ya no tengo broncas en mis nalgas. Gracias», expresó con su humor y baile en «Un grito en la noche».

Nuevamente un vídeo con su historia por 19 cirugías que le salvaron la vida la hizo agradecer estar nuevamente arriba de un escenario ya sea con cicatrices o no, por lo que agradeció a su público para seguir con «Ángeles caídos» mientras arriba de la escalera de su producción posaba junto a unas alas en la pantalla que figuraba detrás de ella.

Con un tambor en sus manos tocó algunos acordes de «La ciudad ardió» con una Alejandra que todo el tiempo se mostró platicadora con sus aguerridos fans al grado que con abrazos y besos los arropó al ritmo del reggae en «Quítatelo».

Su primer invitado en la noche fue Mario Sandoval en «Yo no soy de nadie», para dejar los coros de los presentes en «Mala hierba», por lo que después enfatizó el apoyo de la gente en quien confía para soñar en «Un día de suerte» y así presentar su segunda sorpresa de la noche con Pablo Preciado y sus compañeros de Matisse, compositores de «Mi peor error».

Haciendo un homenaje a sus padres Silvia Pinal y Enrique Guzmán se cambió de vestuario a un chaleco rojo con playera de brillantes y pantalón y salió tocando la batería al ritmo de «La plaga» para continuar con un clásico como «Hey güera» y tomarse la respectiva selfie de la noche, que tal como en sus otras presentaciones resaltó el éxito obtenido con su gira.

Descansando sentada en el escenario y en una canción que dedicó a su hija Frida, que sale en la portada de la revista Playboy de este mes y de la cual se siente orgullosa, cantó «Yo te esperaba», mientras agradecía al mejor público que hubiera tenido.

«Eternamente bella» comenzó con una versión más lenta para poco a poco alocarse con papales brillantes saliendo del techo en su forma de despedirse, pero tras los gritos de «otra» volvió con una capa negra en «Reina de corazones», la esperada «Hacer el amor con otro», con la cual dejó cantar a su público, y nuevamente «La plaga» con la que dijo definitivamente adiós a las 22:40 horas.