Siria asegura haber matado a un centenar de ‘terroristas’

El régimen del presidente sirio, Bachar al Asad, aseguró hoy haber matado a al menos 117 «terroristas» , en su mayoría miembros del Frente al Nusra, la rama de Al Qaeda en Siria, en operaciones en las provincias de Al Quneitra y Deraa, en el sur del país.
Una fuente militar, citada por la agencia de noticias oficial Sana, precisó que 47 integrantes del Frente al Nusra perdieron la vida en el pueblo de Mashara, en Al Quneitra; mientras que setenta han fallecido en las localidades de Ibta y Dael, en Deraa.
La fuente castrense subrayó que en esa zona operan decenas de grupos de ideología «takfiri» (musulmana radical) .
Por otro lado, en la vecina provincia de Deraa, al menos 40 «terroristas» perecieron en la población de Ibta y otros 30 en Dael, entre ellos un dirigente del Frente al Nusra, indicó Sana.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos subrayó que las fuerzas armadas bombardearon hoy áreas de Dael, mientras que se registran combates en áreas próximas.
Siria es escenario de un conflicto bélico desde marzo de 2011, que ha causado la muerte de más de 200.000 personas, según la ONU.
Al menos 35 yihadistas mueren
en el Líbano
Al menos siete soldados libaneses y 35 combatientes yihadistas murieron en los combates que siguieron ayer a un ataque éstos a un puesto de control militar en la zona de Ras Baalbeck, fronteriza con Siria, informó hoy a Efe una fuente de seguridad.
Además, diez soldados libaneses y decenas de yihadistas resultaron heridos, añadió la fuente.
Dos cuerpos de los militares libaneses fueron encontrados en Ras Baalbeck, donde ayer hubo enfrentamientos entre el Ejército y unos 200 yihadistas que se habían introducido desde Siria en esta región. Los choques se produjeron tras un ataque, horas antes, de los extremistas a un puesto de las fuerzas armadas en Tallat el Hamra, en la misma zona.
Entre los radicales fallecidos se encuentran un comandante militar del grupo Estado Islámico (EI), Al Ahwazi, y otros dos responsables de ese grupo terrorista, Ghayath Yomaa y Abu al Walid al Ansari, indicó la fuente de seguridad.
El ejército libanés continúa con las operaciones en esa área conflictiva, que es un punto estratégico que domina las afueras de Arsal, una región limítrofe con Siria.
El pasado agosto, el grupo Estado Islámico y el Frente Al Nusra -filial de Al Qaeda en Siria-, junto a otros movimientos extremistas, mantuvieron un enfrentamiento con el ejército libanés en la región de Arsal y capturaron a una treintena de soldados como rehenes, de los que 25 siguen con vida.
Desde el inicio de la revuelta en Siria en marzo del 2011, la situación de seguridad en el Líbano se ha deteriorado, sobre todo en el norte y noreste del país, y se ha incrementado la división de la población entre partidarios y adversarios del presidente sirio, Bachar Al Assad.