Imagine Dragons quiere más

El gran reto está por delante. Imagine Dragons lo sabe y lo afronta con la seguridad que les ha dado una corta, pero exitosa trayectoria.
Su nuevo álbum, Smoke + Mirrors, que saldrá a la venta el 17 de febrero, será la prueba definitiva de que su carrera continúa en plano ascendente.
Será apenas su segundo disco de estudio, pero con él, dijeron, tratarán de mostrar que el tiempo que han pasado de gira alrededor del mundo les ha dado herramientas suficientes para mantenerse a la vanguardia.
Durante una visita express a México, en donde ofrecieron un concierto privado la noche del martes en la Riviera Maya, y una conferencia la tarde de ayer en la Ciudad de México, el cuarteto de Las Vegas aseguró que lo mejor está por llegar.
“Este disco lo pensamos con una aproximación más global, que reflejara lo que habíamos vivido en distintos países durante las giras. Por eso nos tomamos más tiempo, quisimos planear todo a detalle”, comentó Dan Reynolds, vocalista de la agrupación.
El álbum, producido por ellos mismos, los obligó a mantener un nivel que reprodujera el éxito de su anterior producción, pero que a la vez les permitiera mostrarse como una banda capaz de evolucionar en su sonido.
“Ha sido increíble para una banda como nosotros que hace apenas cuatro años estaba tocando en clubes y que ahora puede hacerlo en estadios. “Queremos aprovechar esa inercia y empujar los límites que tenemos, que la gente se dé cuenta de las posibilidades y que lo hagan en nuestros conciertos, espectáculos que queremos que dejen de ser simples presentaciones para que se conviertan en experiencias completas”, agregó el cantante, quien además confirmó que Imagine Dragons volverá a México para ofrecer un concierto el 27 de abril en las instalaciones del Palacio de los Deportes.
“Sé que muchos deben decir que el público mexicano es el mejor del mundo, y no quisiera sonar repetitivo, pero es cierto. Cada show que hemos dado aquí ha sido increíble, con una energía que no encuentras en ningún otro país.
“Por eso a todas las bandas que conocemos les decimos que tienen que tocar aquí, que es una experiencia que no se deben perder”, agregó el vocalista.
Sobre el disco que los traerá de vuelta, Ben McKee, bajista de la banda, dijo que rentaron una casa en Los Ángeles en la que pudieran encerrarse hasta encontrar el sonido que querían.
“Lo que buscábamos era tener la posibilidad de hacerlo tal y como lo queríamos. Necesitábamos tiempo para afinar todos los detalles y para poder ocuparnos de todos los aspectos de este álbum”, apuntó el bajista.

Durante la conferencia, los estadunidenses se dieron tiempo de explicar qué significó para ellos haber tomado parte del tributo que varios artistas hicieron para celebrar el 50 aniversario de la llegada de The Beatles a Estados Unidos. En ella Imagine Dragons ejecutó Revolution.

“Fue, sin duda, la presentación más difícil que hemos tenido, y no sólo por lo complejo de interpretar una canción de The Beatles, sino porque teníamos que hacerlo para Paul y Ringo.

“Sabíamos que no había modo de igualar lo que ellos habían hecho con la canción, mucho menos superarlos, así que decidimos hacer algo totalmente nuevo”, explicó Daniel Platzman, baterista.

Sobre el futuro inmediato, además de presentaciones en Chile, Argentina, Brasil, Colombia, Puerto Rico y México, la banda se concentrará en la promoción del disco.

“Tenemos que aprovechar que hay un nuevo modo de distribución para hacer que nuestra música llegue a tanta gente como nos sea posible. Queremos que conozcan nuestras canciones y que por ello se acerquen a nuestros shows”, dijo Dan.