Rubén Pérez Ortiz, director de la Casa de la Caridad Cristiana-Hogar del Migrante, describió el año de 2014 como un “un mal año” para la causa de los migrantes que atraviesan el territorio potosino y son acogidos por la diócesis, debido a las muertes registradas.
Lamentó los hechos de violencia y el clima de inseguridad que prevalecieron durante el año recién pasado, pero confió en que éste, el de 2015, será mejor para los migrantes.
Interrogado sobre los efectos de la crisis económica que se ha profundizado entre los mexicanos y que, de alguna manera podrían afectar la solidaridad hacia la comunidad migratoria, el sacerdote dijo que, no obstante la realidad de este fenómeno, “hay personas que se desprenden de un poco de sus pobres despensas para ofrecer su solidaridad a los migrantes”.
Relató que en este período de fiestas de Navidad y Año Nuevo, hubo familias que llevaron a la mesa de los migrantes en la Casa de la Caridad Cristiana los alimentos que estuvieron dispuestos en sus propias mesas, llevando además un poco de alegría a estas personas que se encuentran en tránsito y, en su mayoría, alejadas de sus familias.
Destacó que esta actitud es alentadora, ya que habla de un sentido humanista. Mucha gente comparte sus alimentos, e incluso los recalentados, lo que nos hace mucho bien, compartir esos alimentos en lugar de que estos se desperdicien.
Respecto del flujo emigratorio indicó que este se ha mantenido “bajo” en cuanto a números, pero los flujos se multiplican cada año hacia los meses de febrero y marzo.
Insistió en que el saldo, al final del año de 2014, fue lamentablemente negativo, “por las personas, migrantes, que murieron. Esperamos que este año quede libre de estas situaciones dolorosas”.
Lo más importante es que a pesar de la crisis económica se ha mantenido el espíritu de solidaridad para con las comunidades migrantes que llegan, enfermos, heridos y cansados a tocar a las puertas de la Casa de la Caridad Cristiana-Hogar del Migrante cuya actividad y compromiso se funda precisamente en la capacidad de solidaridad de los potosinos y en ánimo de servicio de sus colaboradores.