Cinco muertos y ocho heridos en un ataque de los Templarios en el municipio de Aquila

En un fuerte operativo los guardias comunitarios detenido en el municipio de Aquila, Michoacán, fueron trasladados al Distrito Federal a las instalaciones centrales de la Procuraduría General de la Republica.
El ataque ocurrió el domingo en la comunidad de Huahua, en Aquila. Las víctimas serían indígenas de la etnia nahua y miembros de las autodefensas. Los agresores lograron fugarse, dijeron las autoridades.
Cinco personas murieron y otras ocho resultaron heridas en un ataque presuntamente perpetrado por miembros del cártel de Los Caballeros Templarios en estado de Michoacán, informaron fuentes oficiales. La Procuraduría General de Justicia de Michoacán (PGJ) señaló que el ataque ocurrió el domingo en la comunidad de Huahua, del municipio de Aquila. Según las primeras investigaciones, las víctimas, indígenas de la etnia nahua y miembros de un grupo de autodefensa, fueron atacadas cuando patrullaban un camino de tierra. Los agresores lograron fugarse, mientras que los heridos fueron trasladados a varios centros médicos de la zona costera de Aquila. Aquila, municipio habitado por indígenas nahuas.
El 16 de diciembre pasado los templarios intentaron asesinar a Cemeí Verdía, comandante del grupo de autodefensa de Aquila, pero confundieron el vehículo en el que se desplazaba e hirieron a cuatro personas, incluido un menor de edad. Verdía y sus hombres detuvieron a uno de los sicarios, identificado como Jonathan Aguilar, quien reveló que el ataque había sido ordenado por Federico González, jefe de plaza de los templarios en la comunidad de La Placita, en complicidad con Mario Álvarez, exalcalde de Aquila. El 16 de diciembre pasado los templarios intentaron asesinar a Cemeí Verdía, comandante de las autodefensas de Aquila Aquila es uno de los tres municipios que tiene Michoacán en la costa del Pacífico, habitado principalmente por indígenas nahuas que viven de la explotación de minerales de la Sierra Madre del Sur.
Los Caballeros Templarios surgieron en 2010 como una escisión del cártel de la Familia Michoacana y desde febrero de 2013 enfrentan a grupos de civiles que tomaron las armas para defenderse de esa organización criminal.

El recrudecimiento de la violencia obligó al Gobierno federal a intervenir en esa región para recuperar el territorio y restablecer la seguridad ante el vacío de autoridad que prevalecía en el estado.