La caída de los precios del petróleo generó un boquete de 8 mil 361 millones de pesos a los ingresos de las entidades federativas entre octubre y noviembre del año pasado, revelaron cifras de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Durante el décimo y on-ceavo mes de 2014, las 32 entidades federativas debieron recibir 99 mil 555 millones de pesos por participaciones federales (sus principales ingresos), pero sólo les transfirieron 91 mil 194 millones.
Esta menor erogación se debió a que la bolsa de la Recaudación Federal Participable, es decir, los recursos que el gobierno capta para luego enviarlos a los gobiernos estatales y municipales, fue menor debido a la reducción en la obtención de ingresos petroleros.
Aunque el país cuenta con una cobertura petrolera que le blinda la cotización estimada del crudo nacional que se exporta, esta protección no incluye las transferencias federales que se hacen al conjunto de los estados y el Distrito Federal.
Sin excepción, en ese bi-mestre todas las entidades federativas registraron un boquete de participaciones federales, aunque las que resultaron con los hoyos fiscales más grandes fue-ron Estado de México, Distrito Federal, Veracruz, Pue-bla y Jalisco, que en conjunto explicaron prácticamente 50% de todo el faltante. Según las cifras del penúltimo informe de finanzas públicas de Hacienda de 2014, todos los recursos que se captan por los derechos ordinarios y especiales sobre hidrocarburos, así como aquellos que van a municipios, y el Fondo de Extracción de Hidrocarburos, obtuvieron menos ingresos que los registrados en 2013.
A pesar de que octubre y noviembre fueron meses negros para las finanzas públicas estatales, los meses previos fueron positivos y permitieron que las entidades obtuvieran más recursos de los presupuestados, lo que les puso en una situación más desahogada respecto a la actual coyuntura de precios a la baja.
No obstante, especialistas reconocieron que para el presente año, la situación podría ser menos favorable.
La directora general de la consultoría Aregional, Flavia Rodríguez, advirtió que si persiste esta tendencia de precios a la baja en el mercado petrolero, los gobiernos subnacionales resultarán afectados.
“Vamos a tener una situación difícil en 2015, porque la Recaudación Federal Participable caerá como consecuencia de la disminución de los menores precios del petróleo lo que implicará menos recursos para los estados y sobre todo los municipios.
“Ni siquiera los fondos de estabilización serán suficientes para compensar esta caída y a parte, las coberturas petroleras que ya compró el gobierno federal no blindan la recaudación federal participable”, explicó.
En los primeros meses de 2013, la baja actividad económica provocó una menor recaudación de ingresos, que en su momento también repercutió en la transferencia que hace el gobierno federal a los estados y municipios.
Sin embargo, para compensar los boquetes que se generaban en las distintas arcas locales, el gobierno permitió que los estados y municipios accedieran al Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF), del cual obtuvieron 8 mil 612 millones de pesos.
Hoy esa cifra es prácticamente equivalente a lo que es el hoyo fiscal que ya se generó entre octubre y noviembre de este año.
El FEIEF es un fondo que se creo justamente para compensar los menores recursos que pudieran llegar a obtener las entidades federativas por diversos choques de índole externa o interna.
El director general de Inteligencia Pública, Marco Cancino, reconoció que esta coyuntura de menores precios del petróleo, junto con lo que ha sido una baja recaudación propia de los estados puede comprometer sus presupuestos en 2015.
Si bien consideró que en 2014 no tuvieron mayores problemas porque en los primeros meses del año recibieron más recursos de los que tenían estimados, la situación no será así durante este ejercicio.
“Esperamos que los gobiernos locales hayan considerado la posibilidad de menores transferencias de participaciones y aportaciones federales, que son 85% de sus ingresos totales. Ojalá que hayan sido lo suficientemente responsables para considerar este actual contexto, porque de lo contrario tendrán que sacrificar el gasto.
“Sin embargo, en un año electoral es poco probable que decidan recortar el gasto y prefieran optar por otras fuentes de financiamiento como el endeudamiento, y entonces la situación sería considerablemente más negativa”, detalló.
El Instituto Mexicano para la Competitividad reconoció en un estudio que las entidades federativas deben hacer un uso más exhaustivo de su política fiscal, porque la recaudación que hoy obtienen está por debajo de su potencial.
Agregó que es necesario que los gobiernos estatales promuevan una mayor cooperación con los municipios para el cobro y recaudación de impuestos y derechos.
