Muriel Bowser juró hoy como nueva alcaldesa deWashington DC, convirtiéndose así apenas en la segunda mujer en ocupar el cargo y el séptimo jefe de gobierno electo desde la creación del Distrito de Columbia más de 200 años atrás.
«El día de hoy heredamos éxitos y fracasos pasados y promesas tardías, pero sobre todo heredamos las enormes expectativas de la gente» , dijo la mujer de 42 años poco después que le fue tomada la protesta en una ceremonia celebrada en el Centro Cívico.
Bowser prometió igualmente luchar para revertir el estado de las cosas en la ciudad capital del país, particularmente lograr que tenga una representación plena en el Congreso, donde su única delegada tiene voz pero no poder de voto.
«No estamos y no vamos a estar satisfechos con el estado de las cosas. A pesar de lo que mucho hemos progresado, sabemos que nuestra ciudad enfrente retos para su progreso» dijo, citando el déficit de 250 mil millones de dólares que hereda.
Bowser heredó además un gobierno local con un problema de credibilidad tras la ola de escándalos políticos que incluyen el alcalde saliente Vincent Gray, quien enfrenta una investigación criminal sobre supuestos pagos ilegales en la pasada campaña política.
Bowser se enfocó empero en el reto financiero que enfrenta la ciudad, ofreciendo que trabajará para hacer de Washington «una ciudad más estable fiscalmente que la situación en que nos encontramos ahora».
