Los 120 millones de pesos que perdió el Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF) con el fraude de Ficrea impactarán negativamente en los diversos programas de construcción, mantenimiento, remodelación de inmuebles, así como en el mejoramiento de las salas y juzgados, que incluyen parte del Programa Ciudad de Justicia.
Los recursos que hasta el momento perdieron forman parte del Fondo de Apoyo para laAdministración de la Justicia (Faajud), que se conforma de los ahorros que obtuvo el tribunal de las partidas presupuestales que les otorgaron en años pasados, así como de las garantías depositadas en los diversos procesos que se libran y cuyos intereses generados en Nacional Financiera (Nafin) se destinaron a un fideicomiso, que encabeza el presidente del tribunal, Edgar Elías Azar.
De acuerdo con el plan de operación del Faajud estos recursos, además de ayudar al incremento del fondo de retiro de los magistrados, también se deben utilizar en el desarrollo de programas y acciones de capacitación, actualización y superación profesional del personal del Tribunal, además de comprar, rentar, reparar o mantener el mobiliario y el equipo necesarios para su funcionamiento.
Otra de las áreas en que impactará esta operación financiera será en la entrega de estímulos económicos para el personal por su desempeño, así como para sufragar gastos que sean necesarios y justificados para el mejoramiento en la administración de la justicia en la capital del país.
Ante la afectación por 120 millones de pesos que sufrió el TSJDF por la mala inversión económica que se realizó con Ficrea, se prevé que en la primera semana se enero —cuando termine el periodo vacacional en el poder judicial capitalino— el presidente del tribunal rinda al pleno un informe de lo que sucedió y de la forma en que se podrá resarcir la pérdida.
EL Faajud. Los recursos que alimentan este fondo provienen de los recursos propios del tribunal, así como de las garantías que se depositan de los diversos procesos legales que se dirimen, mismos que generan un interés y que pasan a formar parte del erario del tribunal.
Según la ley que regula el organismo, los operadores de dichos recursos estaban facultados para invertir en lo que mejor consideraran, como lo establece el artículo 16 del Faajud: “Los recursos que integren el fondo deberán ser invertidos por la institución fiduciaria en valores de renta fija del más alto rendimiento, siempre que éstos permitan la disponibilidad inmediata y suficiente de las sumas que resulte necesario reintegrar a los depositantes o entregar a los particulares que tengan derecho a ellas”.
Pero al mismo tiempo la ley los obliga a rendir un informe de la operación y uso de los recursos, mismos que tendrán que darse en los primeros días de enero próximo.
Además del reporte correspondiente a los magistrados, el tribunal también entrega un balance de los estados finacieros del Fondo a la Asamblea Legislativa del DF, pues si bien el dinero no es para su operación, sí procede del erario público en una gran parte, como son los propios ahorros.