El Payo corta tres orejas en la corrida navideña

Ante tres cuartos de entrada se realizó la tradicional corrida navideña en la Santa María de Querétaro, se lidiaron ejemplares de la ganadería de Fernando de la Mora de desigual presentación y juego.
Abrió el festejo el rejoneador Alejandro Zendejas quien ha tenido una sólida actuación acoplándose en cada momento con su cuadra de caballos, su labor se ha basado en suertes vistosas a caballo como varios pares al quiebro así como piruetas muy templadas sobre la cara del novillo, dejó en buen sitio el rejón de muerte sin embargo el juez de plaza le negó el trofeo llevándose el abucheó de la afición queretana, Zendejas dio la vuelta al ruedo acompañado de los forcados de Querétaro que han realizado una gran pega al primer intento.
El maestro Eulalio López “Zotoluco” quien regresaba tras la fractura sufrida en la mano izquierda, no ha tenido suerte esta tarde en la Santa María, en su primero dejo lances y muletazos de mucha calidad que le fueron coreados por el tendido, ante el astado que era rajado y se frenaba por momentos el maestro a base de esfuerzo ligó algunas tandas con profundidad, su labor fue silenciada por fallar con el acero.
Con su segundo enfrentó a un astado que ofreció mejor juego que su primero, Zotoluco que salió por todas desde su labor con el capote, mostró el sitio que lo caracteriza tirando del toro en todo momento para robarle pases por ambos lados, volvió a fallar con la espada y recibió palmas en su labor.
El queretano Octavio García “El Payo” con su primero ha estado muy entonado con el capote, ya con la muleta dejó tandas interesantes por el lado derecho que le fueron coreadas por el tendido de su tierra, una labor muy templada la realizada por el queretano que terminó su faena con una buena estocada para cortar la primera oreja del festejo.
Ante el escaso juego de su segundo que no se prestó para el lucimiento del diestro queretano, regaló un astado con el cual ha estado en torero, conectando muletazos con mucho reposo y temple por ambos pitones, finalizó con una buena estocada para cortar dos orejas y salir por la Puerta Grande.
El hidrocálido Fermín Espinosa “Armillita” enfrentó a un primer toro que no tuvo transmisión al cual poco le pudo hacer, dejando detalles de su toreo y esfuerzo en todo momento. Con su segundo enfrentó a un toro de mayor recorrido, al cual entendió para ligar tandas importantes por ambos lados, que le fueron reconocidas por la afición, destacó por muletazos largos y templados, falló con la espada en ambos astados para retirarse en silencio.