Eucalipto: Propiedades y Beneficios

El Eucalyptus globulus, Eucalipto blanco, Eucalipto común o Eucalipto azul, es una especie arbórea originaria del sureste de Australia y Tasmania.
Es uno de los árboles más conocidos de la flora australiana ya que por su rápido crecimiento se ha extendido por todo el mundo para su aprovechamiento industrial en la producción de madera, fabricación de pulpa de papel y obtención de aceite esencial.
Ha sido especialmente utilizado para sanear zonas pantanosas al eliminar la humedad de las mismas con la consiguiente erradicación de sus plagas de insectos, principalmente mosquitos, y de las enfermedades que transmiten. Por otra parte, esta capacidad de absorción del agua, convierte a los eucaliptos en especies muy agresivas para el medio ambiente al transformar los ecosistemas por desecación de la tierra donde se plantan.
Existen muchísimas variedades del árbol de eucalipto pero las hojas de la especie globulus poseen múltiples propiedades medicinales muy beneficiosas para mejorar nuestra salud y bienestar. Entre ellas destacan sus propiedades expectorantes, antisépticas y astringentes. En el siguiente artículo de unComo te mostramos con detalle cuáles son las propiedades curativas del eucalipto para que descubras todos sus beneficios.
La principal propiedad curativa del eucalipto es la que está vinculada con el tratamiento de enfermedades que afectan al sistema respiratorio como catarros, gripe, asma, bronquitis, faringitis, rinitis, etc. Se trata de una planta que, gracias a las propiedades antisépticas de sus hojas, es eficiente para combatir los microbios y las bacterias que causan este tipo de infecciones. Veamos a continuación de qué forma podemos beneficiarnos del eucalipto. El eucalipto está indicado para aliviar molestias y dolores de garganta y la tos excesiva. Sus propiedades expectorantes y antitusivas han extendido su uso medicinal para favorecer la desinflamación de las amígdalas y calmar la tos. De hecho, realizar vahos sirviéndonos de hojas de eucalipto es excelente para ayudar a abrir las fosas respiratorias y facilitar el paso del aire, reduciendo la tos e inhibiendo la irritación de los bronquios.
Además, sus propiedades expectorantes también ayudan a eliminar las secreciones acumuladas en los pulmones. Su aceite esencial tiene como principal componente el eucaliptol, el cual actúa como un potente antimucolítico facilitando la expulsión de estas secreciones pulmonares.
A modo de uso externo, el eucalipto ofrece otras propiedades curativas. Se utiliza para tratar algunas afecciones de la piel como eccemas, llagas, irritaciones cutáneas, escoceduras y heridas. Sus cualidades antisépticas y astringentes lo hacen eficaz, además, para el tratamiento de heridas en la piel causadas por el acné.
Los baños calientes con hojas de eucalipto también están recomendados para aliviar los síntomas del reuma y la artritis, pues son estupendos para calmar los dolores de articulaciones propios de estas enfermedades. Otra de las propiedades curativas no tan conocida del eucalipto es la que sugiere que actúa como hipoglucemiante. Es decir, posee la capacidad de reducir los niveles de azúcar en la sangre, por lo que sería efectivo para pacientes con diabetes. Aún así, es conveniente que su uso se haga bajo control y supervisión médica.