Violencia y muerte es el balance del fenómeno migratorio en SLP

El balance del fenómeno emigratorio en el año que está por concluir fue descrito por el sacerdote Rubén Pérez Ortiz, administrador de la Casa de la Caridad Cristiana y premio estatal de Derechos Humanos, como muy dramático por la violencia y muerte de siete migrantes en distintas circunstancias.
Pérez Ortiz reveló que hace unos días, la policía investigadora realizó una serie de diligencias en la Casa del Migrante, tendientes a identificar el cuerpo de una persona asesinada en las inmediaciones de las vías del ferrocarril, en las colonias Tercera Grande y Tercera Chica.
Todo parece indicar –dijo—, que se trata de una persona de origen centroamericano; sin embargo habrá que esperar que concluyan las investigaciones; sería muy lamentable. Dijo que sufrió una muerte inhumana, de gran violencia, apuñalado.
La situación que se vive en ese escenario de la migración es compleja. Tanto que se desconoce el número de personas que en tránsito desde los países centroamericanos han desaparecido en el territorio de San Luis Potosí y de México. Hay un número indeterminado.
“Lo que sabemos –dijo—, es que el mayor número de afectados por las desapariciones se ha registrado en la Frontera Norte.”
En cuanto a las agresiones y muertes a los migrantes dijo que estas se ofrecen en distintas circunstancias en la comunidad de Bocas o en la Carretera 57.
Indicó que el entorno de la Casa del Migrante, en el tradicional Barrio de Tlaxcala, a pesar de que se trata de un asentamiento caracterizado por su conflictividad, los migrantes han encontrado un “barrio muy mexicano”, solidario, respetuoso, hospitalario, a más de que se ha contado con el apoyo de las autoridades de los tres niveles de gobierno.
Los factores que impulsan los flujos migratorios, dijo, son la pobreza y la violencia. Esto lleva a los centroamericanos a cruzar un país estigmatizado y lastimado por la inseguridad y la violencia como es el nuestro; pero estos fenómenos de inseguridad social y judicial no son ajenos en sus países de origen.
Honduras, por ejemplo, es el país más pobre de la región, donde junto con la pobreza campea la violencia desbordada. Dijo que en este sentido, los migrantes se asemejan a la Sagrada Familia, perseguida por Herodes, que busca asesinar a Jesús recién nacido, y que huye a Egipto.
Estas son épocas de mayores flujos migratorios, debido a que hay alguna distención en la seguridad de la Frontera Sur. Al respecto dijo que estarán atentos para atender a los peregrinos, contando con la solidaridad humanitaria de la comunidad y de la Iglesia.
Dijo que este año, con relación a los anteriores, el éxodo centroamericano se redujo un poco. Llegan en promedio entre 70 y 80 personas diariamente.
Ayer la Casa de la Caridad Cristiana entregó un auto compacto, en el entorno de una rifa para agradecer y motivar el apoyo de los creyentes a la causa de los migrantes. El auto, modelo 2015, fue entregado a una trabajadora en esta capital, habitante del municipio de Villa de Arriaga: Eustolia Méndez Muñoz, quien recibió las llaves de manos del Arzobispo Jesús Carlos Cabrero, tras los oficios de la eucaristía del medio día de ayer en Catedral.