La Iglesia de Inglaterra nombra a su primera mujer obispo

Libby Lane, de 47 años, casada y con dos hijos, sacerdote desde 1994, aficionada al saxofón e hincha del Manchester United, ha entrado este miércoles en la historia al ser elegida la primera mujer obispo de la Iglesia de Inglaterra. Será consagrada con todos los honores en una ceremonia en la catedral de York el próximo 26 de enero. Desde ese momento, será obispa de Stockport, una plaza que estaba vacante desde mayo, en la misma diócesis del norte de Inglaterra donde ya trabaja y ha ocupado diversos cargos.
Su nombramiento pone fin a 22 años de luchas: en 1992 el sínodo general —el cuerpo legislativo de la Iglesia de Inglaterra— decidió que las mujeres podían ser sacerdotes y, sin embargo, tenían vetado el acceso a los puestos más altos de la jerarquía eclesial. En julio de este año el sínodo autorizó al fin la ordenación de mujeres obispos y el pasado 17 de noviembre lo aprobó formalmente mediante una enmienda a la ley canónica. Vencía así la resistencia de los representantes laicos del sínodo, influenciados por sectores tradicionalistas evangélicos y católicos. Tras la aprobación, el comité eclesiástico del Parlamento y sus dos Cámaras —los Comunes y los Lores— tramitaron la legislación correspondiente.
Lane ha dicho estar “muy emocionada” y ha dado gracias a Dios. “En este día histórico en que la Iglesia de Inglaterra anuncia el nombramiento de la primera obispa, soy consciente de todos aquellos que me han precedido, hombres y mujeres, que durante décadas han esperado este momento”, ha declarado.
Justin Welby, arzobispo de Canterbury, máxima autoridad de la Iglesia anglicana, ha dicho estar “encantado” con el nombramiento de Lane. “Su vida centrada en Cristo, su sosiego y clara determinación para servir a la Iglesia y a la comunidad”, ha añadido, “hacen que sea una maravillosa elección”. Y su compañero de la elitista escuela de Eton, el primer ministro David Cameron, escribió en Twitter que se trata de “una designación histórica y un día importante para la igualdad”.
El Gobierno tiene previsto promulgar hoy la legislación para que las nuevas obispas puedan sentarse en la Cámara de los Lores, donde la Iglesia anglicana participa en la elaboración de leyes, culminando así en tiempo récord el complicado proceso político y eclesial que se abrió con la aprobación final del sínodo en noviembre.