Mujer fue asesinada y robada su nieta

Mujer, adulta mayor, fue asesinada, aparentemente por su ex yerno y una mujer con quien el tipo hace vida marital. Los presuntos huyeron y se llevaron a una nieta de la ahora occisa, hija del probable criminal. Los hechos ocurrieron en una comunidad de Coxcatlán.
La historia del crimen se supo o luego de la denuncia sobre la desaparición de una mujer de 51 años de edad y su nieta de solo 6 de la comunidad de Calmecayo, en Coxcatlán. La Policía Ministerial del Estado localizo el cadáver de la mujer y sospecha que la menor está viva y en poder de su padre y la mujer de este, probables responsables de este crimen.
El cuerpo de la mujer estaba dentro de una fosa en los linderos del domicilio de la madre de la sospechosa, en avanzado estado de putrefacción y presentaba múltiples heridas de arma blancas en todo el cuerpo, que de acuerdo al resultado de la autopsia, su muerte se debió a fractura de vértebras cervicales y trauma cerrado de tórax.
Apenas éste sábado pasado había sido presentada la denuncia sobre la desaparición de la hoy occisa, Imelda Hernández Martínez de 51 años de edad y su nieta Mareli, de 6 años, la denuncia fue presentada por la hija de la mujer y madre de la niña, Edith quien también denuncio que del hogar de su madre habían desaparecido infinidad de enseres de cocina y electrónicos e incluso hasta animales domésticos se habían robado.
En las investigaciones se logró establecer que la denunciante estuvo casada con el ahora sospechoso, José Carlos N., de 25 años de edad, con el que procreó cuatro hijos de ahora 10, 8, 7 y la ausente de 6 años, y que por problemas de estabilidad decidieron separarse hace dos años, y él se quedó con los hijos mayores y ella con Mareli, haciendo mención que siempre tuvo problemas ya que le quería quitar también a la niña.
La denunciante declaró que su ex marido tiene una pareja con la que vive en la misma comunidad, Norma Patricia N., la otra sospechosa, por lo que de inmediato se acudió a ese sitio donde los investigadores solo encontraron a un menor de 14 años, más no a los presuntos, informando este que su madre Norma y su padrastro José Carlos habían huido llevando a sus otros hijos, y que él prefirió quedarse ya que no le agrada estar con ellos.
Asistido por el Juez Auxiliar del lugar, el adolescente de nombre Manuel confesó haber sido testigo presencial y en una parte coparticipe de estos hechos, obligado por su madre y su padrastro.
Relató que fue el sábado 29 de noviembre pasado alrededor de las 15:00 horas que su padrastro José Carlos y su madre Norma Patricia le dijeron que los acompañara a la parcela de la señora Imelda, cerca de este domicilio estuvieron al asecho de la mujer por espacio de hora y media hasta que la vieron salir con la nieta de la mano y las atacaron.
El padrastro amagó a la mujer con arma blanca, mientras Norma sujetaba a la niña y le tapaba la boca para que no gritara y las trasladaron al domicilio de Doña Josefa, su abuela, el cual estaba desocupado, donde el sospechoso le clava un puñal en el pecho de la mujer en varias ocasiones así como con un desarmador mientras su madre la sujetaba y le tapaba la boca para que no gritara.
Al adolescente le encargaron cuidar a la niña en otro cuarto, pero vio cuando asesinaron a la mujer, después de eso arrojaron el cuerpo en una letrina y fueron a la casa de la occisa de donde se roban la estufa, el refrigerador, un ventilador, lentes, televisión, DVD, y hasta un cerdo, un guajolote, dos novillos y un toro que luego vendieron.
Dijo que días después, al ver que la Policía Ministerial andaba investigando, decidieron huir el domingo 7 de los corrientes, llevándose con ellos a la menor de 6 años y a los otros hijos de ambos.
Con la anterior versión, las autoridades se constituyen en la parcela donde fue arrojado el cuerpo de la mujer, y luego de excavar encontraron los restos de la víctima lo que confirma lo narrado por el menor. El Agente del Ministerio Público y peritos de la Subprocuraduría de Justicia levantan las diligencias del caso y se ordena el traslado del cuerpo al forense la necropsia de ley en la que se determinan las causas de su muerte y se da fe de las heridas y hematomas.
En las investigaciones sobre el paradero de los presuntos, la Policía Ministerial del Estado ya cuenta con varias líneas de investigación en las que es probable la pronta ubicación y posible captura de los sospechosos.