Secuestradores matan a destacada estudiante de la UNAM

La joven de 23 años era alumna de la Facultad de Quimica; sus plagiarios pedían 2 mdp para liberarlaAnayeli Bautista  Tecpa era una estudiante destacada de la Facultad de Química de la UNAM. El domingo pasado, después de varios días de permanecer secuestrada, fue asesinada de un disparo en la cabeza.
El cadáver de la joven, de 23 años, quien había recibido varios reconocimientos por su excelente desempeño académico, fue encontrado en el poblado de Magdalena Petlacalco, en la delegación Tlalpan.
La investigación de su secuestro estaba a cargo de la Policía Federal. Allegados a la indagatoria señalaron que por la joven sus plagiarios habían exigido 2 millones de pesos.
Durante las negociaciones sus familiares entregaron 100 mil pesos y estaban reuniendo más dinero para que la liberaran. Antes de que lo hicieran la asesinaron.
El lunes, este medio dio a conocer el hallazgo del cadáver junto a una barda en la avenida México Ajusco y la calleHacienda, en Magdalena Petlacalco, que forma parte de la zona boscosa de la delegación Tlalpan  y que incluye aSan Miguel y Santo Tomás Ajusco, Topilejo y Parres.
A unos dos metros del cuerpo, los peritos de la Procuraduría capitalina localizaron un casquillo percutido calibre 9 milímetros, que aparentemente usaron para privarla de la vida.
Esa bala entró por debajo de su oreja izquierda y tuvo salida por el cráneo, privándola de la vida.
La mujer fue trasladada al anfiteatro de la Coordinación Tlalpan 2 en calidad de desconocida; sin embargo, el lunes sus familiares se presentaron a identificarla.
Ellos indicaron que Anayeli Bautista, de 23 años, estaba secuestrada y que existía una denuncia en la Policía Federal. Ayer, fuentes de la Procuraduría capitalina indicaron que el expediente que se inició por el hallazgo del cuerpo fue enviado a la Policía Federal para que continúe con la investigación.
Otro hallazgo.  El secuestro y homicidio de Anayeli Bautista en la zona boscosa de la delegación Tlalpan se suma al de Jorge Agustín López Ruiz, cuyo cadáver fue localizado el 10 de noviembre en el pueblo de Santo Tomás Ajusco.
Autoridades consideran que los plagiarios podrían ser integrantes de la misma banda que tienen sus casas de seguridad en el Ajusco, aprovechando que es una zona despoblada y de difícil acceso.  Fuentes de la PGJDF han indicado que esta banda podría estar conformada por ex integrantes del grupo criminal de “El Canario” o “Los Camacho”, que fue desarticulado en 2013 y quienes estaban vinculados con al menos ocho secuestros y cuatro homicidios.
Facultad de Química pide detener a homicidas de alumna
Anayeli Bautista Tecpa, estudiante destacada de esa escuela de la UNAM, fue plagiada y encontrada muerta en las inmediaciones de la zona boscosa de la delegación Tlalpan
La Facultad de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) exigió a las autoridades que a la brevedad se capture al «grupo de secuestradores» que plagió y mató a quien fuera estudiante destacada de esa escuela, Anayeli Bautista Tecpa.
Al hacer público un pronunciamiento, el Consejo Técnico de esa institución dijo que la captura es «urgente y de resolución inmediata, ya que no debe continuar esta ola de crímenes», que asedian a esa zona de la ciudad.
En el documento que se difundió a través de la página de internet de la Facultad se demandó que no debe perecer la impunidad, por lo que exigió «a las autoridades correspondiente que, a la brevedad, resuelvan el caso y se haga justicia».
Tal como lo dio a conocer EL UNIVERSAL, el lunes se encontró el cadáver de la joven junto a una barda en la Avenida México-Ajusco y la calle Hacienda en Magdalena Petlacalco, que forma parte de la zona boscosa de la delegación Tlalpan y que incluye a San Miguel y Santo Tomás Ajusco, Topilejo y Parres.
El domingo pasado, después de varios días de permanecer secuestrada, fue asesinada por sus captores de un disparo en la cabeza.
La joven de 23 años había recibido varios reconocimientos de la UNAM por su excelente desempeño académico.
De acuerdo con datos de la indagatoria, la investigación estaba a cargo de la Policía Federal. Allegados a la investigación señalaron que por la joven universitaria, sus plagiarios habían exigido un rescate de dos millones de pesos.
Durante las negociaciones con los plagiarios, sus familiares entregaron 100 mil pesos y estaban reuniendo más dinero para que la liberaran.