La ubicación de México entre los países con mayor grado de corrupción en el mundo, según los distintos índices multinacionales y nacionales, constituye una vergüenza y una grave preocupación, sostuvo ayer la Arquidiócesis de San Luis Potosí, en voz del sacerdote Juan Jesús Priego Rivera.
De hecho, el Arzobispo Jesús Carlos Cabrero, de propia voz lamentó este posicionamiento negativo del país, al exhortar a la niñez y a la juventud y a la comunidad potosina, a sustraerse de la plaga de la corrupción que está carcomiendo al país y a la sociedad.
Priego recordó que los indicadores de la OCD, ubican a México, entre los países asociados, como el más corrupto; indicó que, en cuanto a los indicadores de Transparencia Internacional, en su índice de percepción de la corrupción 2014, ubica a México en el lugar 103 de 175 países.
Y abundó señalando que de las 31 naciones del Continente Americano, México se ubica entre los 16 más corruptos; y en el grupo de las seis economías emergentes, México es el segundo más corrupto. Es décimo en el Marco del Acuerdo Asia-Pacífico, sólo superado por Vietnam.
Observó que en 19 años en la historia del Índice de Percepción de la Corrupción, México sólo ha escalado posiciones dentro del grupo de las naciones más corruptas. Y, en este lapso ha mantenido un promedio de 3,3 puntos, siendo su mejor calificación la obtenida en el año de 2001 con 3.7 puntos (aún re-probatoria).
El Banco Mundial –dijo—, estima que la corrupción cuesta a México alrededor de 9 por ciento de su Producto Interno Bruto: 1.5 billones de pesos anuales, cinco puntos más que los recursos que el país destina a la educación.
¿Cuáles son los agentes públicos y privados percibi-dos como los más corrup-tos? Policías, partidos políticos, Ministerios Públicos, gobiernos estatales y diputados locales y federales y senadores, en este orden.
Las entidades federativas más corruptas son: el Distrito Federal, Jalisco, Michoa-cán, Morelos, Tabasco, Puebla, Sinaloa, Guerrero, Du-rango, Guanajuato; Queréta-ro, Michoacán, Aguascalien-tes Campeche y Colina.
Es imprescindible dar una batalla conjunta contra la corrupción; es insostenible que México aparezca de manera sistemática entre los países con mayor corrupción en el mundo, por lo que es urgente que tomemos muy en serio el valor de la honestidad, comentó Priego.
