Tiene 27 años y lo acusan de asesinar a dos mujeres

Jorge Armando Solís Rangel era buscado por el homicidio de una mujer, pero fue capturado por el asesinato de otra.

El 19 de agosto pasado, cuando los agentes de la Policía de Investigación llegaron a buscarlo a su casa en la unidad habitacional La Draga, en Tláhuac, no lo encontraron. Su mamá les dijo que estaba en el Reclusorio Oriente.

No mentía, el 6 de agosto le pusieron  por primera vez el uniforme color caqui de preso y entró a prisión por el homicidio de Niza Fernanda Aldana Garrido, cuyo crimen fue planeado por su ex pareja sentimental y en el que Solís Rangel, de 27 años, tuvo una participación activa.

El 11 de abril de este año fue asesinada Rosa María Espejel Mendoza, de 69 años. Los peritos de la PGJDF determinaron que murió por asfixia por estrangulación y traumatismo craneoencefálico.

En la vivienda de la víctima, en la colonia Avante, en Coyoacán, los agentes encontraron entre otros indicios una tarjeta de presentación a nombre de Jorge Armando Solís Rangel, quien por esas fechas había realizado trabajos de impermeabilización en la casa de la mujer.

Los agentes de la PDI lo llevaron a declarar en calidad de testigo. Durante la entrevista el MP no encontró elementos para detenerlo y quedó en libertad.

Sin embargo, la investigación continúo. Los agentes supieron que el móvil del crimen fue el robo, pues faltaban varias pertenencias de la víctima.

Las cámaras de vigilancia de la zona detectaron que el día del asesinato dos hombres salieron de la casa y abordaron un Volkswagen Sedan rojo. Sin embargo, debido a que la toma era lejana no se alcanzaban a apreciar las fisonomías de los sospechosos.

Ante la duda, el MP solicitó una orden para catear la vivienda de Jorge Armando.

A principios de agosto, con el mandamiento judicial autorizado,  acudieron a una casa que rentaba. Ahí encontraron una mochila y una laptop. Esos objetos fueron reconocidos por una hija de la víctima como suyos. Se los llevaron del domicilio de su mamá el día que la asesinaron.

Ante esto, el MP cambió la situación jurídica de Jorge Armando de testigo a probable responsable y ordenó su presentación. Pero ya no lo encontraron.

AYUDÓ A HOMICIDA

El 17 de julio de este año Niza Fernanda salió de su casa en Tláhuac, pero ya no regresó. Ese mismo día su padre recibió llamadas desde el teléfono de la joven, en las que le exigían 700 mil pesos para liberarla. Cuatro días después encontraron su cadáver. La investigación, a partir del rastreo de las señales del celular de la víctima, detectó que antes de desaparecer la joven recibió una llamada de un teléfono que resultó ser el de Jorge Armando.

Supieron entonces que mantenían una relación sentimental y que frecuentaban el mismo gimnasio.

Después de montar vigilancia, agentes de la Fiscalía Antisecuestros lo detuvieron sin saber que otro grupo de agentes —de Homicidios— también lo buscaban.

Ante la prueba de las llamadas, admitió su responsabilidad en el homicidio de Niza. Dijo que el 13 de julio lo buscóLuis Daniel Vázquez Guzmán, ex pareja sentimental de Niza, quien le ofreció 50 mil pesos para que lo ayudara a matarla. Le mencionó que lo único que tenía que hacer era lograr que ella saliera de su casa y llevarla a un punto donde la interceptarían.

El 17 de julio por la noche consumaron el plan con ayuda de un tercer sujeto que está prófugo. La PGJDF concluyó que Luis Daniel, quien tenía un hijo con Niza, la maltrataba y tenía miedo de que lo denunciara ante la policía, pues se dedicaba al narcomenudeo. Por eso la mató. Jorge Armando fue enviado al Reclusorio Oriente, donde ya enfrenta proceso por los crímenes de dos mujeres.