«No tengo nada que esconder»: Angélica Rivera

En un hecho inédito, la primera dama, Angélica Rivera, se presentó públicamente para dar una explicación detallada sobre sus propiedades, entre ellas la casa ubicada en la calle de Sierra Gorda número 150, en las Lomas de Chapultepec, conocida como la “casa blanca”, sus ingresos y la relación laboral con la empresa Televisa.
Anunció que venderá los derechos de compraventa de la propiedad en Sierra Gorda para que no siga siendo pretexto para difamar a su familia.
La esposa del Presidente transparentó la operación para la compra de la casa luego de que se conoció que fue construida por Ingeniería Inmobiliaria del Centro, propiedad del Grupo Higa, misma que participó por medio de su filial Constructora Teya en la licitación del tren México-Querétaro; también se vinculó esta empresa a contratos durante la gestión de Peña Nieto como gobernador en el Estado de México.
En un video colocado en su página de internet www.angelicarivera.com, la esposa del presidente Enrique Peña Nieto advirtió que no permitirá que esto siga siendo un pretexto para ofender y difamar a su familia. “Hoy estoy aquí para defender mi integridad, la de mis hijos y la de mi esposo”, señaló.
“He decidido dirigirme a todos los mexicanos porque ustedes tienen el derecho de conocer la verdad, yo no tengo nada que esconder”.
Dijo que como ciudadana, aun sin ser funcionaria, se siente con la responsabilidad de explicar paso a paso todo lo relacionado con su casa que ha sido cuestionada por algunos medios.
Aclaró que el vocero de la Presidencia, Eduardo Sánchez, adelantó unas aclaraciones mientras ella viajaba a China, pero que al tratarse de un asunto estrictamente personal no contó con toda la información necesaria.
El origen del inmueble. La primera dama informó que a raíz de su trabajo con Televisa logró hacerse de un patrimonio a lo largo de 25 años, y tuvo capacidad financiera para comprar la casa de Sierra Gorda. Rivera detalló que como parte de su relación con Televisa recibió en pago la casa de Paseo de las Palmas 1325, y más de 88 millones de pesos, como parte de su contrato de exclusividad.
“Además de la casa se me pagó un monto total de 88 millones 631 mil pesos más IVA; para dar por terminado el contrato me comprometí con Televisa a no trabajar con cualquier otra televisora por un plazo de cinco años, esto se tomó en cuenta para determinar el monto del contrato”, detalló.
En su declaración de 2010, dijo que declaró a Hacienda ingresos por 131 millones 690 mil pesos y pagó impuestos por 39 millones 278 mil pesos, para demostrar su capacidad financiera.
La esposa del Presidente aceptó que conoce a Juan Armando Hinojosa, al igual que a otros profesionistas y artistas, y le comentó que quería un terreno y construir una casa.
Acordó con él que una de sus empresas buscaría el terreno, construiría la casa a su gusto y con el arquitecto de su elección. Ella se comprometió en tanto a que cuando se concluyera la edificación de la casa celebrarían un contrato de compraventa.
Abundó que en noviembre de 2009 la inmobiliaria adquirió el terreno de Sierra Gorda 150, que es contigua a su casa de Palmas, pero que se inició la construcción en julio de 2010, y después que el terreno adjunto estaba en venta, se adquirió.
Rivera dijo que el 12 de enero de 2012, concluida la casa, firmó con la inmobiliaria una compraventa con reserva de dominio respecto a los inmuebles fusionados de 150 y 160 de la calle Sierra Gorda y con las construcciones edificadas; ese día se le dio posesión.
Precisó que el precio de la compraventa fue de 54 millones de pesos a un plazo de ocho años y con interés del 9%, que hasta hoy ha pagado un total de 14 millones 343 mil 555 pesos que equivale a casi 30% del total del precio pactado; agregó que la casa y las construcciones siguen siendo propiedad de la inmobiliaria hasta que pague el monto total y los intereses.
Anunció que decidió vender los derechos derivados del contrato de compraventa porque no quiere “que esto siga siendo un pretexto para ofender y difamar a mi familia. Hoy estoy aquí para defender mi integridad, la de mis hijos y la de mi esposo”.
También informó que es propietaria desde 2005 de un departamento en Miami, Florida, así como de un departamento en La Herradura, que compró para su madre en 2007.
“Ante todas las acusaciones que han puesto en duda mi honorabilidad, yo quiero dejar muy claro ante todos ustedes, los mexicanos, que yo no tengo nada que esconder”, dijo Rivera.
Por la mañana, el presidente Peña Nieto dijo que su esposa aclararía los señalamientos sobre la propiedad y dijo no saber si el asunto está vinculado “a esto que pareciera un afán orquestado por desestabilizar y oponerse a un proyecto de nación”.