Hasta El Jardín Principal de Matehuala, frente al Palacio Municipal, arribó un piquete de agentes de la Policía Federal para desalojar con violencia a un grupo de jóvenes estudiantes, pertenecientes a diversas instituciones de educación superior y media-superior de la región, que manifestaban pacíficamente su solidaridad con la comunidad estudiantil y los padres de familia de la Escuela Normal Raúl Isidro Burgos.
A través de las redes sociales, los organizadores convocaron a los estudiantes altiplanenses para expresar públicamente su demanda de justicia para los norma-listas de Ayotzinapa, reprimidos, asesinados y sujetos a desaparición forzada entre los días 26 y 27 de septiembre de este año, por parte de agentes de las corporaciones policíacas municipales de Iguala y Cocula, Guerrero.
Comenzaron a concentrarse en el jardín hacia las 17:00 horas de ayer, llevando consigo cartulinas y mantas; disponiéndose a la inscripción de leyendas alusivas, para posteriormente, hacia las 18:00 horas dar inicio a un mitin en el que fijarían su postura.
De manera inopinada, un grupo de agentes federales arribó al lugar a bordo de vehículos oficiales, con torretas encendidas, en un despliegue intimidante. Cercaron y agredieron a los estudiantes que se manifestaban en el kiosco y dispersaron a los ciudadanos que se habían reunido para escucharlos.
El número de estudiantes concentrados en el pequeño kiosco de la capital matehua-lense no llegó a las 20 personas, entre hombres y mujeres; sus pronunciamientos al respecto de la responsabilidad intrínseca del Estado Mexicano en los hechos que produjeron el asesinato de tres normalistas y tres civiles, durante una emboscada de la policía municipal de Iguala, fue considerado por los policías federales como un delito, por lo que, sin mediar dialogo alguno, desataron la represión contra los estudiantes reunidos en el jardín principal.
Los colectivos estudiantiles de la capital potosina, integrados a la campaña de denuncia nacional del presunto crimen de Estado, demandaron la intervención de la CEDH, así como del comisionado de la Policía Federal, Enrique Galindo Ceballos, a fin de que se identifique y castigue a los elementos de la corporación policíaca y a los mandos que instruyeron la represión de los manifestantes.
Los jóvenes denunciaron ademas que los Federales arrebataron celulares a quien intentaba grabar los hechos por lo que queda en duda quien ordeno tal acción represiva abusando del derecho de la libre expresión que se supone se goza en el país.